La burocracia pretende cargarse el viñedo más septentrional del mundo

Kaarlo Nelimarkka es un funcionario municipal jubilado de 74 años que ha tenido la osadía de cultivar viñedo a solo 400 kilómetros del Círculo Polar Ártico, en una ciudad llamada Vaasa, en Finlandia, cuyas temperaturas invernales hacen bajar el termómetro hasta los 36 grados bajo cero.

Pero Nelimarkka no solo tiene que lidiar contra las adversidades climáticas y la expresión invernal de la naturaleza en aquellas tierras sino contra la burocracia comunitaria y la de su propio país. Aunque Finlandia es un país donde la bebida más popular es el vodka con un 50% del consumo total de bebidas alcohólicas, seguida de la cerveza con el 22%, el vino ha logrado pasar del 11% en 1995 al 19% diez años después.

Bruselas considera que el vino de Sundom, que así se llama el área donde se cultiva, no figura entre las zonas de producción vitivinícola diseñadas por la Unión Europea, por tanto no puede utilizar ninguna de las figuras de calidad existentes en el ordenamiento comunitario. Para más inri, Finlandia es, junto a Suecia, uno de los países que aún conservan el Monopolio público de venta de alcoholes, esa figura trasnochada a medio camino entre el SENPA franquista y los soviets de la antigua Unión Soviética. Por ello, el septuagenario vitivinicultor no puede vender sus botellas, que en un año bueno pueden llegar a las 400 entre blanco, tinto y rosado.

Sin embargo, el antiguo funcionario no se rinde y para continuar con su afición y torear, al natural y templando, a la Administración finlandesa, organiza visitas pagadas a su viñedo, que terminan con una degustación de sus vinos en la pequeña bodega. Las instalaciones son propias de un garaje y lejos de la costumbre de vinificar en acero inoxidable, tinajas de barro o cemento, tinas de piedra o tinos de madera, Nelimarkka realiza la fermentación en enormes jarras de cristal.

Asegura que el mayor enemigo de la viña, aparte del frío, el Monopolio y las autoridades comunitarias, es el sol de medianoche que llega a iluminar el viñedo durante más de 20 horas durante un mes entero. Curiosamente, mientras media Europa se derretía este verano durante los meses de julio y agosto, el norte de Finlandia ha vivido uno de los veranos más frescos de los últimos 50 años. Una buena noticia para el hombre que a sus 74 años es capaz de mantener una afición que inició hace ahora 40 años y que ha sacado adelante con su esfuerzo, tesón y la ecuación diaria de prueba/error. Un experto del Monopolio asegura que el vino de Nelimarkka es amable, equilibrado e ideal para acompañar platos de marisco o ensaladas y asegura que pocos expertos podrían decir que ese vino se ha producido en la parte más septentrional de Finlandia y con las manos de un productor de ese país.

José Luis Murcia Periodista. Miembro de AEPEV-FIJEV. Artículos Relacionados

Foto: sundomwine.fi

José Luis Murcia

Periodista. Miembro de AEPEV y  FIJEV