Bodegas Valdemar celebra sus 130 años de historia
La bodega riojana ha celebrado sus 130 años de historia en una cena donde además de presentar su edición limitada para celebrar el aniversario, se hizo un repaso a todas las innovaciones que ha realizado en los últimos años, así como su nueva aventura en Estados Unidos.
Una cena en el madrileño Palacio de Gans, junto a personalidades del mundo del vino y la gastronomía, periodistas e influencers, sirvió de escenario para que la Bodegas Valdemar celebrara sus 130 años de historia. Jesús Martínez Bujanda, presidente, propietario y cuarta generación de la familia, afirmaba “no se puede entender el vino sin entender el viñedo. He transmitido a mis hijos amor por la viña”, secreto, en parte, para que se haya llegado a la quinta generación, a la espera de la sexta.
También hizo un repaso por su recorrido en el mundo del vino y señaló todos los cambios que se han vivido en estos años y cómo esta bodega había estado siempre a la cabeza en innovación, apostando por los vinos de parcela, los blancos fermentados en barrica o por variedades como la Maturana o la Tempranillo blanco. “Tenemos que hacer promoción de lo nuestro” afirmaba Bujanda, y confesaba que, aunque en el pasado había plantado variedades como la Sauvignon blanc, ahora no lo volvería a hacer.
Otra de las innovaciones que están desarrollando se centran en transformar las más de setenta hectáreas que forman la Finca del Marquesado para tener que usar el mínimo de intervención y minimizar el uso de aditivos.
Pero los cambios no sólo los están realizando en Rioja, sino que han dado el salto al continente americano. Ana Martínez Bujanda fue la encargada de presentar el nuevo proyecto de Bodegas Valdemar en Estados Unidos, su bodega en Walla Walla, en el estado de Washington. Ha sido la primera bodega no estadounidense en instalarse en la zona. “Fue un flechazo, las personas, las fincas, los paisajes… queríamos dar un paso fuera de España, en una denominación que no estuviera muy explotada y que las generaciones futuras de la se sintieran parte de ella” explicaba la representante de la quinta generación.
La bodega está proyectada para producir, en un futuro, en torno a 120 mil botellas y se plantean, incluso poder experimentar allí con la Maturana. Lo que ya han puesto en marcha es la forma de socializar de nuestro país: “Lo normal allí es visitar la bodega y catar los vinos, nosotros a eso le hemos sumado el tapeo, la forma de socializar. Estamos enseñando nuestra forma de disfrutar”.
Precisamente el disfrute era lo que se buscaba en esta cena de aniversario, donde se pudieron degustar vinos como su blanco fermentado en barrica Conde de Valdemar Finca Alto Cantabria 2017, sus vinos de finca La Gargantilla Garnacha 2016 y Balcón de Pilatos Maturana 2016, o algunos de sus vinos más conocidos como Conde Valdemar Gran Reserva 2014 y Conde Valdemar Edición Limitada 2015. Todos ellos armonizados con el menú preparado por el Basque Culinary Center.
La ocasión sirvió para presentar la edición limitada Conde Valdemar Gran Reserva 130 aniversario, creada especialmente para el aniversario y cuya etiqueta ha sido diseñada por Vicky Martín Berrocal. “He querido reflejar la pasión con la que elaboran el vino, pero respetando al máximo el producto con el que lo hacen, la uva”. El resultado, es una etiqueta sobria, pero elegante, donde de ven representadas unas uvas y se destaca el nombre del vino en letras doradas para celebrar sus 130 años.
La noche se cerró con un brindis por la familia bodeguera y con la actuación del cantaor flamenco Arcángel.
Periodista especializada en el sector del vino.
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