Solagro apuesta por la diversificación en el medio rural a través de las ayudas Leader

Solagro, empresa multiprofesional de ingeniería y canal de innovación alimentaria de Castilla-La Mancha y que acumula en la gestión de ayudas agroalimentarias una experiencia de más de 20 años, ha gestionado un total de seis expedientes LEADER correspondientes a los Programa de Desarrollo Rural (PDR) 2023 y otros tres del PDR 2024.

Entre ellos se encuentran proyectos en colaboración con Grupos de Acción Local en Ciudad Real y Toledo, estimando un montante total de ayudas que ronda los 300.000 euros, con porcentajes de financiación que alcanzan hasta el 45% en municipios con riesgo de despoblación.  

Eva Mª Lacárcel García, directora del Departamento de Ayudas de Solagro Ingeniería Agroalimentaria, afirma que las ayudas LEADER se han convertido en una herramienta clave para el desarrollo y diversificación de actividades económicas en el medio rural para cooperativas e industrias agroalimentarias, buscando la revitalización de zonas agrícolas y atraer nuevos negocios sostenibles mediante la asignación de fondos a municipios rurales a través de los Grupos de Acción Local (GAL).  

Requisitos para las ayudas Leader   

Dos requisitos esenciales para acceder a estas subvenciones en Castilla-La Mancha es que la industria solicitante debe estar o proyectar su radicación en la comunidad, y el proyecto debe tener un presupuesto de inversión inferior a los 100.000 euros. Estas ayudas son particularmente atractivas para industrias agroalimentarias o cooperativas que no cumplen con los criterios para acceder a otras subvenciones como el FOCAL o Vinati.  

Un aspecto notable es que para aquellas industrias ubicadas en municipios con riesgo de despoblación, la ayuda puede incrementarse hasta un 20%, alcanzando hasta un 65% del total del proyecto presentado en ciertos casos.  

También se premia la implementación de proyectos que impliquen la contratación o mantenimiento de plantilla, mejoras en la línea de producción y la elaboración de productos locales. Asimismo, las iniciativas enfocadas en la sostenibilidad ambiental, la eficiencia energética y el uso de energías renovables son priorizadas en el proceso de evaluación.  

Las ayudas LEADER según Eva Lacárcel continúan siendo una vía crucial para el impulso de la economía rural, promoviendo el desarrollo sustentable y la generación de empleo en territorios que demandan atención.  

Casos de éxito de Solagro en gestión de ayudas LEADER  

Uno de los casos destacados incluye a la cooperativa Santiago Apóstol de Montealegre del Castillo, que invertirá en un centro de transformación y seccionamiento, aumentando significativamente su capacidad de producción.   

Otro de los expedientes fue para la almazara, solicitando una ayuda LEADER para reemplazar su caldera, con una inversión cercana a los 50.000 euros, un gasto que puede ser complicado de asumir sin este tipo de apoyo. Destaca también el expediente tramitado con éxito para la cooperativa San Antonio de Padua, que, tras recibir asesoramiento de Solagro, ha logrado que una inversión inicialmente no subvencionable se convirtiera en elegible gracias a los fondos LEADER.   

Otro caso de éxito es en la cooperativa Nuestra Señora de la Soledad de la Puebla de Montalbán (Toledo) que ha conseguido mejorar la calidad de su producto a través de la instalación de un analizador de orujo, respaldado igualmente por las ayudas LEADER.  

Claves del éxito  

Entre las claves del éxito, Solagro en la gestión de ayudas agroalimentarias, como Focal y Vinati, además de las ayudas Leader,  es desarrollar en cada proyecto la implantación de un Plan Estratégico basado en tres pilares: la subvencionabilidad de todas las inversiones que se planteen en los expedientes de ayuda; la obtención del máximo porcentaje de ayuda y puntuación en nuestra solicitud de ayuda y la minimización de las deducciones en inversiones y control de las desviaciones presupuestarias.  

Solagro no ofrece gestión de ayudas a la inversión, y a la ingeniería únicamente, sino con el desarrollo de un plan estratégico en cada cooperativa o industria, que haga nacer las inversiones desde la necesidad de mejorar su posición en el mercado, para a posteriori crear un plan director de estas inversiones, lo cual redundará en un menor coste de las mismas, mejorará la rentabilidad del producto entregado por el socio, y se conseguirá una mejor posición de la marca de la propia cooperativa o industria.