Novedades de primavera: vinos para descorchar en Semana Santa

La primavera es el momento donde se concentran muchas de los lanzamientos al mercado de las nuevas añadas de las bodegas. Un momento para degustar cómo se ha desarrollado en bodega la última añada y atisbar, según los casos, cómo evolucionarán con unos cuantos meses más en botella.

En este artículo, presentamos 8 vinos de diferentes partes de la geografía española para hacer un viaje a través de la copa, sin riesgo de helada, lluvias o viento, ya que este inicio de abril, a nivel climatológico, se presenta movido, quizá por la cercanía de la Semana Santa.

Vinos que bien puede degustarse en interior, con buena compañía, o esperar a ser descorchados en cuanto suban ligeramente las temperaturas y el sol invite a meter todas las botellas, desde tintos a blancos, en cubitera.

Maar de Cervera Sauvignon Blanc 2021 (Encomienda de Cervera)

• Vino de la Tierra de Castilla
• P.V.P.: 14 €

Este vino, elaborado por Encomienda de Cervera, pertenece a un paraje singular volcánico. Un sauvignon blanc de una viña situada en tierras de origen volcánico, en pleno macizo volcánico de Campo de Calatrava, en Ciudad Real, a unos 850 metros de altitud, en un microclima que favorece las noches frescas.

Se trata de un monovarietal de sauvignon blanc del que apenas se elaboran 2.900 botellas. Tiene una crianza en barrica de 3 meses con sus lías y el resultado es un vino amplio, redondo, con marcados toques florares y a fruta de la pasión, en contraste con aportes cítricos. Y, además, es vegano.

Mar de Fondo 2019 (Miradorio)

•  I.G.P. Costa de Cantabria
• P.V.P.: 14 €

Mar de Fondo refleja en copa el entorno marino donde crece. Un vino procedente de viñedos situados a menos de un kilómetro de la costa en el pueblo cántabro de Ruiloba. Miradorio intenta recuperar una tradición perdida en la zona, como es la elaboración de vino, y es de las pocas bodegas que conforman la I.G.P. Costa de Cantabria.

Se trata de un ensamblaje de cuatro variedades, hondarrabi zuri, albariño y godello, que los propietarios de la bodega acertaron a plantar, como “fusión” de las variedades blancas presentes en la cornisa cantábrica, al no tener en esta IGP variedades autóctonas reconocidas. Aunque en la mezcla también se incluye riesling, plantada por la adecuación a las características de la zona, y aportar acidez y aromas.

Tiene un trabajo de seis meses con sus lías y el resultado es un vino salino, con acidez y notas a frutas cítricas y albaricoque. Untuoso en boca y con un final pronunciado.

La Jefa 2019 (Matsu)

• D.O. Toro
• P.V.P.: 20 €

Es el cuarto vino de la bodega de la D.O. Toro del grupo Vintae, así como su primer blanco. Una variedad de vino que, además, no es muy común en la zona. Matsu utiliza en este vino las uvas procedentes de las cepas de variedades blancas que se encuentran salpicadas entre los viñedos viejos de tinto, con edades comprendidas entre los 50 y los 150. Un trabajo laborioso que quiere servir de homenaje al trabajo de las mujeres en el campo, que no siempre se ha reconocido.

La variedad que predomina es la malvasía, aunque también están presentes otras variedades blancas de la zona. Para su crianza, se utilizan bocoyes (barriles de gran tamaño) de roble de 600 litro durante 145 meses. El resultado es un vino con muchos matices de fruta de hueso y vainilla, además de ser redondo en boca y con buena acidez. Y está certificado como vegano.

Hito Rosado 2021 (CEPA 21)

• D.O. Ribera del Duero
• P.V.P.: 8,90 €

En primavera no pueden faltar los rosados. La nueva añada del rosado CEPA 21, la versión “boutique” de los conocidos vinos de Emilio Moro, en la Ribera del Duero, destaca por su color provenzal, cada vez más de moda entre los consumidores de rosado. Hito Rosado está elaborado a partir de viñas de tempranillo situadas en Castrillo de Duero, la viña a menos altura de esta bodega.

Fermenta a baja temperatura durante 20 días y después reposa sobre sus propias lías, para aportarle cuerpo, antes de ser embotellado. Con un color de corte provenzal, salmón muy pálido, en la copa ofrece sutiles aromas a frutos rojos y florares, con un toque de acidez refrescante en boca.

GTX. Garnacha (Terra de Falanis)

• Vino de España
• P.V.P.:22,90 €

En este caso, el vino elaborado por la bodega Terra de Falanis, surgida a raíz de la bodega mallorquina Ánima Negra y que reúne a amigos elaboradores de diferentes regiones vitivinícolas, “no tiene añada”, así que no importa tanto cuándo se acuda a ella, sino la intención de disfrute con la que se descorche.

Este vino, aunque presume en su etiqueta de no tener nombre de uva, nombre de origen, ni añada, sabemos que es una garnacha de Calatayud, con crianza en grandes tinos de roble usado. Y es que se considera “una garnacha pirata”, todo, como reivindicación a determinadas normativas que impiden indicar cierto tipo de información en la etiqueta, según bajo qué indicación esté el vino en cuestión, u obligan a ceñirse a ciertos tipos de elaboración. Una forma de reivindicar su forma de hacer vino sin ataduras.

Es un vino que expresa mucha fruta; es muy fresco y mineral en boca. Puro disfrute, para no pensar en orígenes ni añadas.

Marco Real Syrah Pequeñas Producciones 2020 (Bodegas Marco Real)

• D.O. Navarra
• 10 €

Desde Navarra, este monovarietal de syrah que además ha sido premiado como mejor vino de la D.O. Navarra y formará parte de los vinos que representen a la denominación en sus actos de promoción.

En esta nueva añada ya luce cambio de etiqueta, siguiendo la línea del resto de elaboraciones de la gama “pequeñas producciones” de Marco Real, donde se quiere ensalzar la Sonsierra Navarra. Se trata de una syrah procedente de 4,5 hectáreas de viñedo, situadas en la Finca La Pared (denominada así por lo pronunciado de su inclinación).

Con una crianza en barrica muy breve, es un vino con gran frescura, con marcadas notas a violeta y fruta negra.

Cara Norte 2019 (Bodega Montebaco)

• D.O. Ribera del Duero
• P.V.P.: 16 €

Bodegas Montebaco, situada en Finca Monte Alto, la frontera entre las localidades vallisoletanas de Pesquera y Valvuena de Duero, a una altura de 900 metros, presenta la nueva añada de su vino de parcela, Cara Norte 2019. Las uvas proceden de una viña orienta precisamente al norte, con una inclinación del 15%, y trabajada en ecológico.

Un 100% tempranillo de la D.O. Ribera del Duero, con 14 meses de crianza en barrica, presenta una capa baja y un atractivo color picota. En boca es fresco, con una marcada fruta negra. Con capacidad para reposar en botella y aportar una mayor complejidad.

Senderos de Ukan 2019 (Ukan Winery)

• D.O. Rioja
• P.V.P.: 20 € aprox.

Ukan es el proyecto en Rioja Alavesa impulsado por Koldo, la última generación de la familia Eguren, y que apenas ha empezado a andar, pues la primera añada de la bodega que se lanzó al mercado fue la 2018, aunque ya apunta maneras.

El nombre (ukan en euskera hace referencia a tener y a haber, según la situación) quiere hacer un guiño a las intenciones de esta bodega de querer poner en valor lo que se tiene, el patrimonio vitivinícola que hay en la zona. Se centra, por tanto, en viñas de entre 20 y 70 años, con una viticultura cuidada y con la intrención elaborar solo pequeñas producciones.

En el caso de Senderos de Ukan, es el vino de entrada de la bodega, y está elaborado a partir de viñas de tempranillo de varios pueblos de la zona. Con una crianza de 12 meses en roble francés, es un vino con marcada fruta negra y toques herbales, redondo, con acidez y persistencia en boca.

Susana Molina

Periodista especializada en el sector del vino.