María José Huertas, sumiller: “Ojalá adoptemos la costumbre de tomar vino de una manera más hedonista”

Adaptarse al cambio, adoptar nuevas formas de interactuar con los clientes y proveedores y actuar ágilmente ante esta y otras situaciones críticas futuras con el fin de empezar más fuertes, son los objetivos de Ágora Mediterránea 5.0 el evento online promovido por Mujeres en gastronomía. Todos los martes a través de las redes sociales de rostros conocidos, se analiza la situación actual, se comparten las vivencias con el fin de que el sector de la gastronomía pueda salir unido y reforzado de esta crisis.

Cómo afecta el COVID a la alta gastronomía fue la charla que moderó Carlos Latre y en la que estuvo presente María José Huertas, sumiller del restaurante Paco Roncero en el Casino de Madrid. La que fuera Premio Nacional de Gastronomía 2003 y Mejor Sumiller 2005 está aprovechando el confinamiento para seguir aprendiendo y probar nuevos vinos. “Estoy catando blancos frescos, que son perfectos ahora que viene el verano y también estoy probando los vinos de altura. Ahora que estamos en casa es un buen momento para degustar los vinos con calma, de una manera más hedonista, quizá más como se hace en países como Estados Unidos, donde la gente es cuando llega a casa y se relaja cuando se toma un vino, mientras que en el Viejo Mundo estamos más acostumbrados a tomarlo con la comida y no tanto por placer”. En este sentido, añade: “Ojalá esta forma de tomar vino, más romántica y por placer, la adoptemos”.

No hay duda que las nuevas medidas de seguridad que se van a imponer en los restaurantes, van a modificar el hecho de pedir un vino. Ya simplemente el hecho de ofrecer la carta de vinos, tendrá un protocolo más exigente (ponerse los guantes, desinfectar el menú, etc.) pero quizá por eso “el trato con el cliente será más cercano, porque en lugar de pedir la carta va a resultar más cómodo pedir consejo al sumiller. Y eso que dicen que ‘los ojos nunca mienten’ lo podremos comprobar más que nunca porque, con la mascarilla, será la mirada el foco de atención”, comenta María José Huertas.

Aunque el 80% del público del restaurante de Paco Roncero es extranjero “y suelen estar muy entregados al maridaje, esta situación también puede provocar que los clientes nacionales se abran más a descubrir otros vinos. En este sentido, de un tiempo a esta parte, ya se notaba una evolución”, asegura la sumiller.

A la pregunta de Carlos Latre de si el mercado nacional va a subir, María José lo tiene claro: “Yo siempre he vendido más vino nacional a los extranjeros, pero ahora toca apoyar más a nuestro país, por lo que es el momento de valorar la calidad que siempre ha habido en los vinos españoles y no solo me refiero a los clásicos. Aunque la gente es muy consciente de que hay vinos buenos en toda España, ahora toca más que nunca valorar que en nuestro país tenemos una gran variedad en uvas, en climas, en terrenos… Lo tenemos todo”.

En cuanto al tema del precio, la sumiller opina: “Decir que en España los vinos tienen  buena calidad/precio es mentira: tenemos vinos caros y vinos baratos. Si es verdad que estamos en un país que puedes beber muy bien por un precio razonable, pero no siempre pasa.” Y concluye: “No me gusta tener la imagen de ser los pobrecitos que tienen el precio barato, el vino tiene el precio que tiene que tener. Ahora lo importante es estar concienciados en apoyar nuestros vinos.”

María Orriols

Periodista especializada en temas de Estilo de Vida.