Turismo en el Valle de Ocón, el valle desconocido de La Rioja

El Valle de Ocón es una de las joyas escondidas en La Rioja. Un entorno desconocido, incluso para muchos riojanos, pero que atesora unos cuantos atractivos llenos de encanto y autenticidad para diversos tipos de turismo.

Fue declarado por la UNESCO Reserva Mundial de la Biosfera en 2003, por su gran riqueza natural y además es una de las pocas reservas Starlight de nuestro país, lo que significa que salvaguarda la calidad del cielo nocturno, ideal para la contemplación de las estrellas y el astroturismo.

Se sitúa en el noreste de La Rioja, a unos 30km de Logroño, y conecta Sierra La Hez con el Ebro. El valle de Ocón comprende los municipios de Alcanadre, Ausejo, Corera, El Redal, Galilea y Ocón. Este último suma además otras seis pequeñas localidades: Los Molinos, Las Ruedas, La Villa, Santa Lucía, Pipaona, Aldealobos y el despoblado Oteruelo.

Un entorno único, donde las actividades agroalimentarias de la zona no sólo respetan el paisaje, sino que permite realizar diferentes actividades turísticas y gastronómicas, además de ofrecer otras propuestas de ocio en plena naturaleza.

¿Qué visitar en el Valle de Ocón?

Su símbolo y atractivo más conocido es el molino de viento harinero. Ubicado entre Santa Lucía y La Villa, fue reconstruido siguiendo fielmente el diseño original, junto a las ruinas del original, cuya construcción data del siglo XIII. Es un ejemplar único en La Rioja, y el único visitable en el Norte de España.

El visitante también puede ver cómo se elaboraba el aceite de oliva el siglo pasado en este valle en el Trujal de Ocón: una antigua almazara que es el centro de interpretación del Aceite. O visitiar el Museo Etnográfico de Corera, donde la asociación de mujeres del pueblo enseña cómo se vivía aquí hace un siglo.

Otra opción es la visita al yacimiento arqueológico de Parpalinas, para descubrir la historia más antigua del valle. Los restos excavados y ubicados en un enclave espectacular incluyen una iglesia tardo antigua del siglo V, visitada en vida por San Millán de la Cogolla y fundamental en la cristianización de esta zona, así como los restos de una villa romana surgida en el siglo I d.C.

Gastronomía en el Valle de Ocón

Además de naturaleza y patrimonio, también se puede disfrutar de la gastronomía en el Valle de Ocón.  Se pueden degustar los productos que aquí se elaboran, así como conocer su origen:  desde bodegas que ofrecen actividades de enoturismo y catas; una finca de cerdos ecológicos que organiza ecovisitas; una granja de gallinas camperas visitable; un trujal que elabora aceite de oliva virgen extra y que ofrece actividades de oleoturismo; descubrir cómo trabajan las abejas y practicar el turismo apícola; o conocer una finca de cerezos de altura impresionante, entre otras actividades.

Todos estos productos, así como el resto que se elaboran en este valle pueden degustarse en los restaurantes de la zona que ofrecen una gastronomía basada en productos de kilómetro cero. Sin olvidar la multitud de alojamientos rurales con encanto, donde pasar la noche y disfrutar de unos días de tranquilidad, para que la experiencia sea completa.

Redacción

Redacción La Gaceta del Vino