Sexismo en el mundo del vino, o no

Leyendo las noticias internacionales, he encontrado el caso de las acusaciones de agresión sexual, hacia un famoso elaborador de vinos de Sancerre. Por supuesto, va por delante la presunción de inocencia, pero como para todo, hay que escuchar a ambas partes. Creo que este tipo de noticias nos hacen pensar sobre si el mundo del vino está libre de sexismo, o no.

Todo salió a la luz con  la cuenta de Instagram «Paye ton pinard«, creada por la enóloga de Beaujolais Isabelle Perraud, para denunciar el sexismo en la industria del vino.  A través de esta red, las víctimas de acoso cuentan sus ingratas experiencias.

En dicha cuenta se mencionó a dicho enólogo como acosador sexual, a lo que éste respondió con una denuncia por difamación a su creadora. El juicio ha tenido lugar el pasado 6 de abril, pero todavía no se conoce la sentencia.

Un famoso restaurante de Copenhague, y varios distribuidores, rápidamente retiraron los vinos del enólogo de Sancerre de su carta. En respuesta, un grupo de productores de vino, muchos de ellos destacados en el mundo del vino natural, han escrito una carta abierta denunciando la serie de cancelaciones tras las acusaciones de agresión sexual.

La polémica está servida, ¿sabemos alguno de nosotros lo qué ha pasado en realidad? ¿Es lícito contar en público la conducta impropia de un señor o señora, o la manera adecuada es denunciarlo a la policía?.

Personalmente me hace pensar, y mucho. ¿Qué es denunciable y qué se cree que es una conducta autorizada, o graciosa ?.  En mi opinión, hay comportamientos que se han admitido durante muchos años que, aunque seguramente no son estrictamente denunciables (o sí),  tampoco son agradables.

Un toque de atención tampoco viene mal.

Por otro lado, hacer una vendetta en contra de alguien, sin conocer los resultados del  juicio, tampoco creo que sea adecuado. ¿Y si todo es mentira? , ¿y si es una falacia?, que eso también puede pasar. En el caso del que hablamos, los que se hacen llamar «soutienasebastienriffault«, están defendiendo a una de las partes, sin conocer la historia completa. Alineándose incondicionalmente con el productor.

Creo que debe ser la justicia la que debe resolver este caso. Y a partir de ahí, seguiremos hablando de este tema.

Lo que es indiscutible, es que el respeto debe prevalecer por encima de todas las cosas,  y que los comentarios y comportamientos impropios deben desaparecer. El sector del vino está vinculado a catas, presentaciones y fiestas en muchos casos. Pero esto no debería ser, bajo ningún concepto, excusa para acercamientos físicos indebidos  o para  comentarios groseros; yo particularmente los he sufrido.

En el juicio que nos ocupa, Lua Morena Jernhed Macedo Costa, sommelier en Malmö, Suecia, comentó al juez «Pensé que si iba a la policía a decir que un hombre me había tocado las nalgas, no me iban a tomar la denuncia«. ¿La policía toma nota de ese tipo de acusaciones?, y si lo haces ¿llegan a algún sitio?. Sexismo en el vino

Queda romper una lanza por la mayoría de los hombres y mujeres de este sector, que se comportan de manera profesional, educada y correcta. Pero, las excepciones deberían replantearse su comportamiento muy seriamente. Insisto, no es gracioso ni agradable, es despreciativo y altamente incómodo. El respeto debe imperar en todos los casos. Sexismo en el vino

Del caso de Isabelle Perraud sabremos el veredicto el 8 de junio, y veremos los resultados.

Espero que este artículo nos haga recapacitar sobre los comportamientos vejatorios e impropios a los que se nos somete en ocasiones.  Normalizarlos, por ambas partes, es un error. Sexismo en el vino

María Giménez

Directora de La Gaceta del Vino