Rarezas (I)
Vinos elaborados como los romanos. Vinos enterrados en vasijas de barro. Vinos tintos que se fermentan en barrica. Vinos envejecidos bajo el mar. Vinos elaborados con uvas congeladas de países productores y fermentados en una nave industrial de Hong Kong…
Vinos elaborados en un país tropical. Vinos religiosos. Vinos elaborados por cultivares perdidos y extinguidos. Vinos que fueron deleitados por las realezas europeas siglos atrás. Vinos raros. Vinos que apenas se conocen. Vinos sabrosos. Aunque no todos.
Pero todos con su carácter. Todos con su tipicidad. Todos con su expresión. Todos con su identidad. Todos únicos en su especie.
Durante las próximas semanas voy a escribir acerca de esas rarezas que de vez en cuando alguien nos habla y que no sabes si creértelas. Por eso, hago un llamamiento para aquel a quien le interese que investigue sobre cierto tema o vino. Estoy dispuesto a leer las sugerencias de los lectores. Estoy dispuesto a levantarme de la mesa e indagar sobre esas pequeñas joyas escondidas por el mundo. Aquel que quiera que hable de esa rareza de la que le hablaron alguna vez, que se ponga en contacto conmigo a través de mi Twitter.
Lo raro nos sorprende, despertándonos el morbo y la curiosidad. Lo raro nos acerca a una experiencia nueva. A veces buena, a veces mala. Pero siempre nos llama la atención.
Arturo Blasco
Enólogo
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Licenciado en Enología.
Master en Dirección de Marketing y Ventas.
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