Cómo atraer al nuevo consumidor de vino

Los tiempos están cambiando y las bodegas, cada vez más, están buscando nuevas opciones que atraigan a un público que anteriormente no consumía vino.  Algo que les llamen la atención y les divierta.

Desde el vino azul, hasta el vino sin alcohol, pasando por las bebidas desalcoholizadas, pueden ser un primer paso para iniciarse en el maravilloso mundo del vino.

¿Deberíamos penalizar un vino por venderlo en lata o en bag-in-box?, ¿por tener un nombre divertido o una etiqueta interactiva?, en mi opinión cualquier producto que sea una puerta de entrada o una nueva forma de consumo del mismo debería ser bienvenida.

Todos solemos empezar por esos sabores dulces que aceptamos desde pequeños, para continuar aprendiendo sobre matices (me gusta más ligero, más fuerte, …). Después bebes más y ya empiezas a descubrir muchas particularidades, a aprenderte las marcas que has probado y te han llamado la atención, e incluso a recomendarlas. Y así, suma y sigue.

Pero para todo esto debemos empezar por algún sitio, y muchas marcas se están dando cuenta e intentan atraer a nuevos consumidores.

Por ejemplo, Bodegas Jaime Landa acaba de lanzar una bebida sin azucar, sin gluten pero con un un 5% de alcohol de base vínica. Puede ser una alternativa para el nuevo consumidor. Estará disponible  a partir del 6 de junio en los supermercados. Para darla a conocer Wimbi (nombre de la misma) se ha convertido en el patrocinador oficial de Partidazo de Yutubers 2.

Otras bodegas tradicionales buscan nuevas opciones, como Freixenet que, acaba de sacar al mercado un espumoso 0,0%,  sin alcohol y bajo en calorías. De esta manera ofrecen una nueva opción con la intención de ampliar el abanico de consumidores.

Pensemos en el vino en lata, que empieza a darse a conocer en el público español. Aquí hay quienes ya lo están haciendo muy bien y ya han conseguido un nicho de mercado.  Hablan de sostenibilidad (aluminio 100% reciclado y reciclable, protegido por una película interna para asegurar la calidad), de practicidad y de diversión. La calidad no está reñida con el formato, vinos jóvenes y espumosos en un envase ideal para la piscina, barbacoas y fiestas con amigos.  Ejemplos de esto son Zeena, o Glass canned wines, entre otros.

El nuevo consumidor busca siempre un más allá, un aliciente.  Si un vino que se llama el loco y lleva una camisa de fuerza va a llamar más la atención que una etiqueta y caja al uso. Las etiquetas interactivas o de realidad aumentada te puede contar desde la historia de un asesinato come en «19 crimes» hasta películas e historias de la cultura de las mismas bodegas, ¿no os parece interesante para una tarde con amigos?.

No quiero hacer un alegato a consumir cualquier cosa, pero si creo que deberíamos estar más abiertos a las nuevas ideas y fórmulas tanto para introducir al consumo del vino , como a la forma de presentarlo y venderlo. No se nos olvide que en Inglaterra, si en la etiqueta está escrito «Chateau» ya sabes que lo van a pagar más caro.

Todavía me queda mucho en el tintero sobre este tema y dará para otros artículos, pero por esta vez lo dejamos aquí.

Como decía mi abuela, para gustos los colores que la vida está llena de matices al igual que el vino.

María Giménez

Directora de La Gaceta del Vino