La World marca la tendencia de los próximos meses en el vino a granel
Quien piense que la World Bulk Wine Exhibition (WBWE) no será vital para marcar la tendencia en los precios mundiales del vino durante los próximos meses, se equivoca. Y es que este evento se celebra, por vez primera, en un escenario tan complejo com
La nueva cosecha, para más inri, nos trae una disminución de cosecha muy importante, ya confirmada por la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), como consecuencia del importante retroceso en las vendimias de España, Francia e Italia, además de Hungría y Rumania, entre otros muchos, y con leves incrementos en Argentina, Chile, Australia, Nueva Zelanda, Grecia y Portugal.
Sin stocks en los almacenes de vino a granel y con una nueva cosecha mermada, los próximos meses, que pueden llegar a ser hasta dos años, parecen dirigidos a la consolidación de las subidas de precio que se produjeron el pasado verano y a la venta limitada por parte de algunos operadores.
Esta tendencia, administrada de manera inteligente por algunas bodegas, debe dar pie a conseguir un mayor margen de valor añadido en las ventas exteriores y a trabajar en pro de fidelizar clientes para los próximos años, ya que en el comercio internacional las coyunturas nunca son eternas. Jugar, como están haciendo algunos, a dar el pelotazo este año y a dejar sin vino a muchos de sus clientes de siempre, es lo más parecido a aficionarse a la ruleta rusa, cuantas más vueltas das al tambor del revólver, más posibilidades tienes de llevarte un tiro en la sien.
La WBWE cierra este año sus puertas con un enorme trasiego de vendedores y compradores en el que se han incrementado de manera clara las transacciones, aunque todas ellas, en un primer balance, sumen algo menos de vino negociado que en la edición anterior como consecuencia de la caída de la oferta en cantidad, que no en calidad ni en variedad, variables que se han disparado.
En esta IV Edición, cuyo ciclo de conferencias ha girado en torno a la ampliación de la oferta mediante una mayor comercio de vinos monovarietales y/o con denominaciones geográficas y de origen, continúa el aumento de ventas de vino diferenciado y de mayor calidad con la consiguiente generación de mayor valor añadido y de mejores oportunidades para que los compradores ofrezcan al público mayor variedad y mejor calidad.
La feria culmina con un incremento del 30% de los participantes que pasan de 100 a 130, con un aumento de los compradores que se sitúan en torno al millar y con un total de visitas superiores a las 4.000, según datos de la organización. Tras la WBWE comienza un año apasionante en el que compradores y vendedores de vino se enfrentan a una situación tan novedosa como atípica. Y es que la cita de Ámsterdam como las pasarelas de París, Nueva York o Milán comienza a marcar la tendencia del vino que se va a llevar.
Periodista. Miembro de AEPEV y FIJEV
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