España importa, sobre todo, espumosos de Italia y Francia

Las importaciones españolas de vino continúan siendo anecdóticas, ya que ascienden a 55 millones de litros por importe de 188 millones de euros, mientras las exportaciones alcanzan los 2.284 millones de litros por importe de 2.847 millones de euros, con una balanza comercial favorable de 2.659 millones de euros, según se desprenden de los datos recogidos y analizados pormenorizadamente por el Observatorio Español del Mercado del Vino.

Las importaciones españolas de vinos a granel suponen aproximadamente el 37% del total de compras con 20 millones de litros por un valor de 13 millones de euros, de los que 16 millones de litros corresponde a vinos a granel básicos sin DOP, IGP ni denominación de variedad y 3,5 millones a graneles con indicación varietal, un segmento que se ha disparado en un año de oferta limitada. Curiosamente, los vinos a granel con DOP e IGP cuentan con un comercio prácticamente simbólico y apenas llegan al millón de litros.

El grueso de las compras españolas en el exterior se centra en tres mercados (Italia, Francia y Portugal) y en dos tipos de vinos: espumosos y aromatizados. De Italia adquirimos un total de 34 millones de litros por valor de 79 millones de euros, algo menos de 8 millones de litros de Francia por 101 millones de euros y 14 millones de litros de Portugal por 16,5 millones de euros.

El grueso de las compras españolas en el exterior se centra en Italia, Francia y Portugal; y en dos tipos de vinos: espumosos y aromatizados.

Los vinos espumosos, cuyas compras retrocedieron un 18%, alcanzaron los 9,5 millones de litros con un aumento de la facturación del 5% hasta los 98 millones de euros. De ellos, 5,5 millones de litros llegaron desde Italia, con un protagonismo cada vez más claro del Prosecco; mientras que de Francia se importaron 3,4 millones de litros. La media del capítulo ascendió a 10,40 euros el litro.

Por otra parte, las compras de vinos aromatizados (tipo vermús) ascendió a 16 millones de litros, la mayoría de ellos procedentes de Italia y con un precio medio de 2,79 euros el litro.  En definitiva, un capítulo más anecdótico que otra cosa que, como indicábamos la pasada semana, ha contado con una subida espectacular de las compras en Australia, siempre, eso sí, desde cifras realmente modestas.

José Luis Murcia

Periodista. Miembro de AEPEV y  FIJEV