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El ciclo anual de un viñedo. Capítulo 2. La poda (a)

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El ciclo anual de un viñedo. Capítulo 2. La poda (a)
El ciclo anual de un viñedo. Capítulo 2. La poda (a)

La poda se realiza para regular la capacidad de carga (cantidad de uva), de la planta. Regulando la carga se puede diseñar un poco la calidad de la uva.

Para este artículo he pedido que me asesore Felipe Martínez. Técnico vitícola de la Cooperativa del vino de Yecla "La Purísima".

“Pode usted bien y tendrá  buena uva” – Felipe Martínez

 

Si queremos mucha cosecha y disponemos de mucho aporte hídrico o riego, debemos dejar muchas yemas. Y entonces la planta producirá mucha cosecha.

En el caso contrario, si queremos producir poco, dejaremos un  número de yemas reducido y el aporte hídrico será menor o nulo.

Las yemas son esos pequeños esbozos algodonosos situados en los nudos de los sarmientos, las cuales darán vida a los futuros sarmientos y racimos de nuestras cepas. Regulando el número de yemas y su distribución se conseguirá una mayor o menor calidad.

Se poda para producir cosecha, para regular vigor, para producir calidad y para que la planta ajuste el vigor a la disponibilidad de agua y recursos de materia orgánica, abonos y suelo en el que se encuentra.

La poda de calidad tiene en cuenta todos los detalles como suelo, calidad y por supuesto la perspectiva de la bodega.

La vid es una planta de porte medio y que necesita un clima templado con estaciones marcadas. El ciclo de la vid productivo se desarrolla desde abril a noviembre y el resto de meses la planta se encuentra en parada vegetativa.

Es pues en ese período de parada vegetativa, en el cual realizamos esta faena. Además, en esta época el daño producido por los cortes es menor. Es decir realizamos los cortes de los tallos en parada invernal con ausencia de savia, permitiendo así su cicatrización. Aunque se puede sar una posible entrada de hongos de madera por dichos cortes, hay tratamientos para prevenirlo.

En Yecla, y buena parte de la península Ibérica, se poda en vaso, cordón royat y poda guyot. Son sistemas de formación totalmente diferentes:

La poda en vaso, es un sistema libre, de fácil formación inicial, sin apoyos y consta de 3-5 pulgares de dos yemas, 6-10 yemas por planta. En dichos pulgares, la yema basal, la más cerca al tronco, es llamada “la ciega”.

La poda en vaso tiene diversos puntos de vista, pero nosotros planteamos una poda de buenos cortes que dejen pocas heridas, que eliminen los secos del año anterior (la parte que quedó por encima de la yema). Y que respeten la circulación de la savia por fuera, dejando los cortes por encima del brazo, es decir, al interior de la planta.

Si dejamos siempre como pulgar el trozo de sarmiento que nace de la yema primera, la cepa crecerá y el brazo se alongará bastante, y si por lo contrario procedemos a dejar pulgares de sarmientos nacidos de la yema ciega o basal, el brazo crecerá menos. Con la poda en vaso conseguimos regular lo que queramos hacer durante la brotación del ciclo siguiente: repartiendo el espacio, ofreciendo una geometría que haga que el aire circule por todos  los racimos, con una distribución equidistante de todos sus tallos o sarmientos. Jugamos, pues, con los 360 grados, distribuyendo así los 4-6 brazos, cada uno de ellos con un pulgar de dos yemas. Esta es la poda más usada en los cultivos de secano.

Figura 1. Poda en vaso

 

Cuando vamos a sistema de poda apoyados como la espaldera, en nuestra zona –Yecla- practicamos dos tipos de podas diferentes, la poda Cordón Royat y la poda Guyot.

El Cordón Royat consiste en dejar dos brazos a cada lado del tronco, uniéndose con la cepa siguiente de manera que se forma un cordón desde el inicio de la hilera hasta el final. Este sistema permite dejar de 3-5 pulgares de dos yemas sobre cada brazo, dejando un total de 12-20 yemas por cepa.  Es de costosa formación inicial, pero de fácil manejo una vez creado los brazos fijos.

Figura 2. Poda Cordón Royat en espaldera.

 

El problema que plantea es que esos brazos a los 12-16 años engordan y dejan de ser productivos. Hay variedades como la Cabernet, etc., que necesitan de podas largas, pues las yemas a partir de la tercera o cuarta son más productivas. Hay agricultores que a partir de esa edad, cortan dichos brazos y vuelven a dejar otros nuevos, para renovar y mejorar la productividad.

Las espalderas son sistemas que permiten la mecanización y por lo tanto la poda debe tenerlo en cuenta. Se poda lo más recto posible, lo que hace que en ocasiones haya que saltarse algún principio como dejar siempre el pulgar de la yema basal.

Pero en otros casos y en variedades como la Merlot o la Cabernet la poda que se realiza es poda larga y el sistema usado es el sistema Guyot

El sistema Guyot consta de un pulgar y una vara de 6-8 yemas. Dicha vara se atará al alambre después, con goma o con hilo.  

La poda del año siguiente consistirá en eliminar la vara y dejar otro pulgar, y otra vara nueva. Es decir la fructificación es sobre madera larga y es ideal para plantas de variedades como las antes citadas.

Figura 3. Poda Guyot. Foto tomada del libro "Poda de la Vid" de Luis Hidalgo.

 

 

Arturo Blasco  
Arturo Blasco
Enólogo

 

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