Los nuevos Vinos de Villa y Paraje de la D.O. Bierzo ya piensan en el siguiente paso
Las unidades geográficas menores en la Denominación de Origen Bierzo son una realidad. Más de cinco años han sido necesarios para lograr el nuevo pliego de condiciones aprobado en el que se clasifica el viñedo por municipios, parajes y parcelas. Pero este pliego ha traído más novedades para esta zona vitivinícola: la autorización de las variedades autóctonas merenzao y estaladiña, la elaboración de monovarietales con garnacha tintorera, la posibilidad de elaborar claretes y la incorporación de 10 nuevos municipios a la D.O.
Todo un abanico de posibilidad que dotan a los productores de un mayor número de herramientas para diferenciar sus vinos. Según explica Misericordia Bello, presidenta de la denominación, la acogida por parte de las bodegas de estas nuevas clasificaciones geográficas y la posibilidad de utilizar las nuevas variedades de uva ha sido “francamente positiva” ya que había un interés previo muy claro, y puntualiza: “son las propias bodegas las que lo han empujado y un equipo específico del Consejo Regulador el que ha llevado a buen puerto esta aventura que nos sitúa entre las denominaciones de origen más avanzadas”.
En cuanto a las nuevas variedades, admite que su incorporación es en realidad “una oportunidad que teníamos que aprovechar. Estamos hablando de variedades autóctonas, que se dan francamente bien en El Bierzo y que añadirán más especificidad a nuestros vinos. Queremos ser elaboradores de grandes vinos, de vinos únicos, de vinos ligados a nuestra tierra para ofrecer una experiencia con personalidad propia”.
“sin esta nueva clasificación Banzao no tendría sentido. El proyecto está enfocado a diferenciar las distintas parcelas» Silvia Marrao, bodega Banzao.
Clasificaciones geográficas menores
La D.O. Bierzo es la única denominación en España –junto a la D.O.Ca Priorato– que ha implantado este sistema de zonificación, inspirada en el modelo de Borgoña, donde se pone en valor parajes y viñas concretos. Una valoración acertada en una zona vitícola con una orografía desigual, con diferentes inclinaciones, exposiciones, etc.
En estas clasificaciones geográficas menores, los rendimientos máximos deben reducirse respecto a lo establecido por la denominación para el resto de viñas, situados en 11.000 kg/ha, excepto en la palomino que se permite hasta 12.000. Para los Vinos de Villa -la zonificación más amplia- la reducción debe ser del 20% y del 25% para poder ser Vino de Paraje. Esta limitación de rendimiento deriva en una mejora de calidad, y por tanto esperan que repercuta en el precio medio de venta, pero además favorece la conservación del patrimonio vitícola del Bierzo. La conservación de viñas viejas, así como la recuperación de viñedos muy antiguos, que hasta ahora, en muchos casos se había conseguido gracias a la visión adelantada (o incluso el espíritu romántico) de ciertos viticultores, ahora se ve recompensada con esta normativa. Además, en estos casos, cumplir con las limitaciones, dados los rendimientos de los viñedos viejos, se plantea casi sin dificultades. La reducción será mayor según se suben escalones de calidad: del 30% para la Viña Clasificada y del 35% para el máximo nivel, la Gran Viña Clasificada.
La zonificación significa, según Ricardo Pérez (Descendientes de J. Palacios), “la revalorización de las diferentes geografías y paisajes del vino a través de una clasificación basada en la tradición y el conocimiento de los mismos”.
Un cambio que persigue potenciar la imagen de calidad de la D.O. Bierzo, tanto a nivel nacional como internacional, y con el que quieren lanzar un mensaje claro: “somos una denominación que cuida extremadamente su producto”, afirma Bello.
De momento casi un tercio de las bodegas (unas 25) han comunicado su intención de acogerse a las nuevas designaciones, aunque para poder hacerlo tendrán que superar los requerimientos y las exigencias de calidad exigidos. Ahora mismo son cuatro las bodegas que lucen en sus contraetiquetas las clasificaciones de de Vinos de Villa o Vinos de Paraje, pero desde el Consejo Regulador esperan que pronto se vayan incorporando muchas más bodegas.
Las primeras bodegas
Banzao, Cantariña Vinos, Descendientes de J. Palacios y Losada Vinos de Finca. Estas son las bodegas que han lanzado al mercado los primeros vinos de Villa y de paraje en la D.O. Bierzo. Aunque algunos ya llevaban trabajando años con este tipo de planteamientos en la cabeza, a la hora de desarrollar sus proyectos, como Ricardo Pérez, enólogo en la bodega Descendientes de J. Palacios. Pérez afirma que esto supone no sólo un reconocimiento a la parcela, al vino, y al propio pueblo de Corullón (en su caso), sino “la revalorización de las diferentes geografías y paisajes del vino a través de una clasificación basada en la tradición y el conocimiento de los mismos”.
Desde bodega Banzao, bodega en la que los ocho vinos que elaboran están ahora bajo clasificación de Villa o Paraje, la aprobación del nuevo reglamento la califican como “vital” pues “sin esta nueva clasificación Banzao no tendría sentido. El proyecto está hecho a medida de la nueva clasificación de la DO Bierzo. La nomenclatura de nuestros vinos, su elaboración y el trabajo en los viñedos, están enfocados a diferenciar las distintas parcelas y terruños de San Pedro de Olleros” afirma Silvia Marrao, viticultora y enóloga de Banzao. De esta forma ahora pueden ofrecer a sus clientes “la garantía de la procedencia y control de los viñedos de los que proceden nuestros vinos”.
«No ha cambiado nada en nuestros vinos, seguimos haciendo lo mismo, pero ahora hay una certificación en la contraetiqueta, que es un marchamo de calidad adicional», Santiago Ysart (Cantariña Vinos de Familia)
Por su parte, Santiago Ysart, de Cantariña Vinos de Familia, cree que lo mejor de este pliego es que “reorienta la mirada hacia el viñedo” y es una forma de “reconocer el trabajo de viticultores de bodegas artesanas donde tratan de reflejar la identidad de viñedo en un vino”, una forma de conseguir contar la singularidad de una parcela. Aunque admite que nada ha cambiado en sus vinos, ni si quiera en la etiqueta, y matiza: “ahora hay una certificación en la contraetiqueta, que es un marchamo de calidad adicional. Todo lo que sea garantizar calidad es bueno”.
En esta misma línea se expresa Amancio Fernández, enólogo de Losada Vinos de Finca: “lo importante es que el reglamento da cabida a una serie de vinos que ya estábamos haciendo y que ahora están certificados como Vinos de Villa o Paraje”. Admite, además, que esto dará “dinamismo» a la zona y que lo esencial es que “seamos más precisos en las elaboraciones para poder vender vinos con un precio medio superior”.
A pesar de su reciente salida como Vinos de Villa o Paraje, estas bodegas ya están pensando en los requisitos que tendrán que superar para que estas y otras parcelas consigan, en un futuro, las clasificaciones mayores. Cada uno ya calcula cuál de sus vinos estará en esas categorías, aunque habrá que esperar por lo menos cinco años, para ver los primeros Vinos de Viña Clasificada y hasta 10, para los ansiados Vinos de Gran Viña Clasificada, o lo que serán los futuros “Grand Cru” del Bierzo.
Estaladiña, Merenzao, Garnacha
Entre los nuevos vinos de paraje, algunos lucen doble novedad, como el vino Cantariña 6, que además de ser ahora vino de Paraje, está elaborado con merenzao, y además pasa a ser también la primera bodega que embotella en la denominación un monovarietal de esta variedad. Un vino de cupo, pues se trata de una pequeña parcela de la que se obtienen unas 300 botellas.
«Estas novedades dan dinamismo a la zona y lo esencial es que seamos más precisos en las elaboraciones para poder vender vinos con un precio medio superior”, Amancio Fernández (Losada Vinos de Finca)
Por su parte, Losada Vinos de Finca, al dar luz verde a los monovarietales de garnacha tintorera, ha podido amparar bajo la D.O. Bierzo a su vino La Senda del Diablo. Otra edición limitada, elaborada con viñas viejas recuperadas.
Periodista especializada en el sector del vino.
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Felicito la DO Bierzo por dedicarse a variedades autóctonas en lugar de utilizar las francesas de las que el mundo ya está saturado. Las imitaciones desprestigian el vino español.
Nice read.
Merenzao isn’t an indigenous variety. It is a synonym of Trousseau.