Europa declara nulo el registro de la marca Carlos Moro en favor de Emilio Moro

La Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) ha declarado nulo el registro de la marca de la Unión Europea nº 9.678.145 “Carlos Moro” registrada, entre otros productos y servicios, para vinos, tras concluir que «el uso de la marca supondrá un aprovechamiento indebido del carácter distintivo o del renombre de la marca (Emilio Moro)”.

Bodegas Emilio Moro presentó una solicitud de declaración de nulidad contra el mencionado registro de la marca “Carlos Moro” por entender que se aprovechaba de la reputación y el renombre logrados durante estos años. Así, la Oficina Europea ha confirmado, a través de su resolución, que Emilio Moro, cuya marca ha sido utilizada desde los años 90, goza de renombre en España en el sector del vino. Por tanto, al concurrir un apellido idéntico (“Moro”) en ambas marcas, la EUIPO considera que “la marca posterior (Carlos Moro) evocará en la conciencia del público” la marca Emilio Moro, y es probable que los consumidores asocien una marca con la otra, incurriendo en un “aprovechamiento indebido del renombre” de Emilio Moro.

Desde Bodegas Emilio Moro sostienen que la coexistencia en el sector vitivinícola de productos ofrecidos bajo otras marcas que utilizan el apellido ‘Moro’ como parte relevante de su marca supone un aprovechamiento injusto de su reputación y, además, puede generar confusión en los consumidores en relación con la marca ‘Emilio Moro’. Esto supone un “beneficio para otras marcas aparecidas de forma repentina y, por tanto, asociadas en menor medida a este apellido, así como un menoscabo a la reputación y al carácter distintivo de Emilio Moro”, afirman.

Así, la demanda de nulidad fue presentada por parte de Bodegas Emilio Moro en ejercicio de su derecho y deber de proteger el legado y reputación de la compañía y de velar por el derecho de los consumidores a elegir bien informados, según declaran.

Tres resoluciones, discrepancias y litigios pendientes

Esta resolución de la EUIPO, de nivel europeo, que ha anulado el registro de la marca “Carlos Moro” para identificar vino por “aprovechamiento indebido” de la reputación de Bodegas Emilio Moro, es la única resolución de registro de marca que aplica al sector vitivinícola en su conjunto. Además, es la principal y más relevante de las tres resoluciones existentes en relación con el registro de la marca Carlos Moro, por su mayor alcance.

Las otras dos resoluciones hacen referencia al registro de la marca “Carlos Moro” para “servicios de investigación en el sector vitivinícola”, entre las que se han generado discrepancias a nivel europeo y español. La resolución de la EUIPO (nivel europeo) ha denegado el registro de la marca “Carlos Moro” también en este ámbito. Sin embargo, a nivel nacional, la OEPM (Oficina Españoa de Pantenes y Marcas) ha concedido el registro de la marca “Carlos Moro” pero de forma limitada al ámbito de “servicios de investigación en el sector vitivinícola”, y sólo es aplicable en el ámbito Español.

Así las cosas, existe una resolución de la EUIPO que deniega el registro de la marca para el sector vitivinícola en su conjunto. Las otras dos resoluciones en las que existen discrepancias se refieren a “servicios de investigación en el sector”, siendo la de mayor alcance también contraria al registro de la marca “Carlos Moro”.  

Pero todas las resoluciones son recurribles, lo cual supone que ninguno de los procesos ha sido cerrado de forma definitiva. Con independencia de estos procesos administrativos, queda pendiente un procedimiento judicial en el Juzgado de lo Mercantil en España que decidirá sobre el uso de la marca “Carlos Moro” más allá de su registro. Este procedimiento se inició a instancias de Bodegas Emilio Moro, que interpuso una demanda por infracción marcaria contra Carlos Moro y las sociedades del Grupo Matarromera, y todavía está pendiente de resolución.