En España el consumo de productos ecológicos ha aumentado más del 96% desde 2012
Ecovalia ha presentado el Informe Anual de la Producción Ecológica en España 2020, donde la tendencia es la mejora constante de las cifras. Las estadísticas se han recopilado de datos publicados por FIBL e IFOAM en Biofach 2020, así como de datos adelantados por el MAPA.
El presidente de Ecovalia, Álvaro Barrera, afirma que “el cultivo ecológico es un valor añadido”, más en un contexto como el actual donde los productores denuncian el bajo precio al que se les pagan sus productos. Aunque desde sus inicios ha tenido que desmentir falsos mitos, una de las razones para que las cifras recogidas por el informe se hayan querido plasmar de forma clara, sencilla y amena, para conseguir que la información sea lo más divulgativa posible y llegue al público general.
En el contexto internacional, la superficie destinada a producción ecológica ha aumentado un 546% en los últimos 21 años, alcanzando actualmente más de 71 millones y medio de hectáreas. Oceanía, con un 50%, encabeza la producción, seguida de Europa (22%) y Sudamérica (11%). Por otro lado, los alimentos ecológicos vendidos en el último año a nivel mundial superaron los 97.000 millones de euros, donde EE. UU. lidera el ranquin con el 42% del total, seguido de Alemania (11%) y Francia (9%). En este caso, España se sitúa en el décimo lugar (1,9%).
Sin embargo, “2019 ha sido un año del que nos podemos sentir orgullosos, porque las cifras son ascendentes” expone Granados, además de contar en los últimos años con “un aumento porcentual envidiable por cualquier otro sector”.
España es el primero en producción en ecológico de Europa, con más de 2 millones de hectáreas (seguido de cerca por Francia e Italia) y puede presumir de contar, casi, con una hectárea en ecológico por cada 10 dedicadas a la agricultura, con un 9,5% de su superficie agrícola en ecológico. Si se analiza por tipo de cultivo, los que más crecen en superficie son los cereales, el olivar, los frutos secos y la vid; aunque los que más han crecido respecto al año anterior han sido los cultivos subtropicales, los frutales, y los cítricos.
Otros sectores como la ganadería, la acuicultura o la apicultura también se unen a la producción ecológica y ven cómo las cifras aumentan cada año. Este año destaca el aumento de gallinas de puesta y las lubinas de acuicultura.
El crecimiento del sector se debe, en parte, a la participación del sector industrial: “que la industria agroalimentaria se haya interesado por el sector ecológico es un indicativo de salud de la economía de nuestro sector” aseguró Granados, porque, continuaba “es una señal de que está creciendo la demanda”. En este sentido, la industria que más aumentó fue la de producción vegetal en ecológico, con un 15% respecto a 2018.
Una apuesta que también se nota en el número de operadores. Según los datos de este año, España tiene 46.463 operadores ecológicos y el sector es atractivo para todas las categorías de operadores, aunque los que más crecen son los que están relacionados con la comercialización.
Ahora mismo, España gasta 46,6€ per cápita en productos ecológicos (4,6€ más que el año anterior), muy lejos de cifras como las de Dinamarca o Suiza (con 312€), pero sí que lidera el crecimiento a nivel mundial, donde el consumo, desde 2012 ha aumentado más del 96%, y un 16,4% respecto al año anterior.
Además, como explica Diego Granado, secretario general de la asociación “el sector ecológico es un sector social, genera empleo y constituye una renovación para el ámbito rural”. El mercado ecológico en España genera 93 mil empleos y más de 2.000 millones de euros.
Por otro lado, este tipo de cultivo conlleva beneficios para el medioambiente. Desde Ecovalia, han demostrado recientemente, tras el análisis de más de 1.000 investigaciones, que “todos los cultivos en ecológico reducen la huella de carbono, en comparación con la agricultura no ecológica, en mayor o menor medida” explicaba, donde el olivar en ecológico llega a reducir el 100% la huella de carbono, o el 33% como consigue la vid. Otros beneficios de este tipo de cultivo son la generación de un suelo fértil y rico en materia orgánica, el uso de energías renovables, o el desarrollo de prácticas como el uso de variedades tradicionales o las cubiertas vegetales.
Sin embargo, desde Ecovalia, invitan a no relajarse, pues el sector se enfrenta a varios retos como la nueva PAC donde “el sector ecológico tiene mucho que decir”, asegura Granado, al estar previsto que el 40 % del presupuesto va a ir a acciones por el clima. También habrá que superar las consecuencias de los aranceles desde Estados Unidos y el Brexit. Además, el sector debe saber adaptarse a la diversidad de agentes y de diferente tamaño que se están incorporando, fruto del interés que ha despertado el sector en los últimos 10 años.
Por otro lado, como afirma Barrera, “hay que seguir trabajando porque el consumidor actual demanda otros productos ecológicos, como los textiles, y quiere llenar toda su cesta con productos ecológicos”, así que, aseguran, hay un largo camino por recorrer.
Desde el Ministerio de Agricultura, Pesca y Medioambiente, destacan la labor de Ecovalia en el desarrollo de la producción ecológica en España. Recuerdan que siguen desarrollándose las medidas para producción ecológica recogidas en la estrategia 2018-2020, y se estudiará cómo será su continuidad al finalizar el año, en función de la nueva PAC, el Brexit y el resto de hitos internacionales que se den.
Infografías: informe Ecovalia
Redacción La Gaceta del Vino
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