Acuerdo histórico en la UE para modernizar el sector vitivinícola: el «Paquete Vino» ve la luz

El Consejo y el Parlamento Europeo alcanzaron este lunes, 4 de diciembre, un acuerdo provisional para la reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) del vino, popularmente conocida como «Paquete Vino«. Este marco modernizado busca dotar de herramientas al sector para afrontar los retos del futuro, desde el cambio climático hasta la evolución de la demanda de los consumidores.

El acuerdo, celebrado tras complejas negociaciones, actualiza normas que en algunos casos llevaban décadas vigentes, con el objetivo declarado de crear un sector más competitivo, resiliente y orientado al futuro. La reforma intenta responder a la preocupación por el desequilibrio entre oferta y demanda, agravado por la caída del consumo en algunos países tradicionales, y a la necesidad de una producción más sostenible.

Principales pilares del acuerdo:

1. Flexibilización de las prácticas de vinificación: Se amplía el catálogo de prácticas enológicas autorizadas a nivel comunitario, incorporando técnicas más modernas. No obstante, se mantiene la prohibición de vinificar con azúcar añadido (chaptalización) en las regiones del sur de Europa, una medida muy debatida que enfrentaba a países del norte y del sur.
2. Sostenibilidad y cambio climático: Se introduce una mayor flexibilidad para que los Estados miembros apoyen inversiones que ayuden a los viticultores a adaptarse al cambio climático y a adoptar prácticas agrícolas más sostenibles y eficientes en el uso de recursos.
3. Reconversión y reestructuración de viñedos: Se simplifican y amplían las normas para que los productores puedan replantar sus viñedos en ubicaciones diferentes dentro del mismo Estado miembro, una herramienta crucial para adaptarse a nuevas condiciones climáticas o patológicas. También se refuerzan las ayudas para la reestructuración del viñedo.
4. Mecanismo de gestión de crisis: Se fortalecen los instrumentos existentes, como el seguro de cosechas y el régimen de almacenamiento privado, para proporcionar una red de seguridad más robusta ante crisis de mercado o catástrofes climáticas.
5. Etiquetado e información al consumidor: Si bien no era el núcleo de este paquete, la reforma se alinea con las normas actuales que exigen la declaración de ingredientes y valores nutricionales, facilitando la transparencia para el consumidor final.

Próximos pasos

El acuerdo provisional requiere ahora la adopción formal tanto por el Parlamento Europeo como por el Consejo (que representa a los Estados miembros). Este trámite se espera que se complete en los próximos meses, con la publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea entre enero y febrero de 2024. A partir de su entrada en vigor, los países dispondrán de un margen para transponer y aplicar las nuevas normas.

Reacciones del sector

Las primeras reacciones han sido cautelosas pero positivas. Organizaciones como el Comité Europeo de Empresas del Vino (CEEV) han valorado el acuerdo como un «paso importante» que proporciona «herramientas adicionales para la gestión del mercado y la capacidad de adaptación del sector». No obstante, desde algunas regiones y asociaciones de productores se subraya que el éxito dependerá de cómo se implementen concretamente estas normas en cada país y de la dotación presupuestaria final de la Política Agrícola Común (PAC).

El «Paquete Vino» culmina un proceso de varios años y se erige como la reforma más significativa del sector en la última década, con la ambición de sentar las bases para la viticultura europea del siglo XXI.

Redacción

Redacción La Gaceta del Vino