Pau Roca (OIV): La guerra y la inflación pueden afectar seriamente al vino
El director general de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), Pau Roca, ha señalado su temor a que el conflicto bélico desatado con la invasión de Ucrania por parte de Rusia, además de efectos colaterales perniciosos como la inflación, afecte seriamente al sector del vino, problema que se vería agravado por la escasez de envases y el incremento de los precios del transporte.
Roca ha presentado el pasado miércoles, 27 de abril, en París las Perspectivas sobre Producción Mundial de Vino en 2021, en las que ratificó una bajada de la producción del 4% hasta los 250 millones de hectolitros, con una caída espectacular del 13% en el hemisferio norte y una subida del 19% en el hemisferio sur. A preguntas de La Gaceta del Vino sobre las tentaciones de algunos Gobiernos de la UE de poner trabas al vino como producto alcohólico, Roca ha asegurado que su organización siempre debate sobre criterios científicos “y hoy el vino es más una solución que un problema”.
Ha recordado que, tras el frenazo chino, la superficie vitícola parece estabilizada en torno a los 7,3 millones de hectáreas con España a la cabeza con 964.000 hectáreas, y que los tres grandes productores han sufrido importantes caídas en sus cosechas con 44,5 millones de hectolitros para Italia, 35 millones para España y 34,2 para Francia. Ha resaltado la ralentización del vino chino que no habría llegado a los 6 millones de hectolitros.
Se ha congratulado del crecimiento del consumo en un 1% hasta los 236 millones de hectolitros, con liderazgo para Estados Unidos con 33,1 millones, seguido de Francia con 25,2 millones, Italia con 24,2 millones, Alemania con 19,8 millones y Reino Unido con 13,4 millones. España sería sexta, empatada con China y Rusia, con 10,5 millones de hectolitros.
Los mayores consumos por persona y año, dejando de lado anécdotas como El Vaticano o Andorra, sitúan en primer lugar a Portugal con 51,9 litros, seguida de Francia con 46,9 litros, Italia con 46 litros, Suiza con 35,3 litros, Austria con 30,6 litros, Australia con 28,7 litros, Alemania con 27,5 litros y España con 26,2 litros.
Ha resaltado que el comercio internacional del vino afecta al 47% de su producción por lo que puede y debe considerarse un producto globalizado y ha recordado que en 2022 se han batido récords con un comercio total de 111,6 millones de hectolitros por importe de 34.400 millones de euros.
Ha manifestado el importante incremento porcentual del comercio de vinos a granel en países como Alemania, Estados Unidos, Reino Unido, Francia o Italia y el peso de sus ventas en otros como España, Australia, Sudáfrica o Chile.
Finalmente ha realizado un informe preliminar de la vendimia 2022 en el hemisferio sur, recientemente acabada, que será inferior a la del pasado año con caída superior al 13% en Argentina hasta los 10,85 millones de hectolitros, 12,1 millones de hectolitros (-10%) en Chile; 3,25 millones en Brasil que recula un 10% y 13,45 millones de hectolitros en Australia, que cae casi un 5,5%. Por el contrario, subiría Nueva Zelanda un 12,6% hasta los 3 millones de hectolitros y un 0,5% Sudáfrica hasta los 10,65 millones de hectolitros.
Periodista. Miembro de AEPEV y FIJEV
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