Keyline: nuevo sistema de plantación en bodegas RODA
El cambio climático lleva a las bodegas a buscar nuevas zonas, más frías, septentrionales y elevadas, pero también a efectuar cambios en su viticultura para seleccionar las variedades mejor adaptadas, aprovechar las precipitaciones y causar una erosión menor en los suelos, así como un impacto menor en el medio ambiente.
Es el caso de Bodegas Roda. Situada en el emblemático Barrio de la Estación de Haro, en La Rioja, para su nuevo proyecto han buscado una localización en el pueblo más noroccidental de La Rioja, Cellorigo, al pie de los Obarenes, lindando al norte con la provincia de Burgos. Una localización que, confiesan, no habrían tenido en cuenta a principios de los años 90, cuando salían al mercado sus primeras añadas. Sin embargo, los cambios en el clima han propiciado esta elección.
Se trata de una finca de 10 hectáreas de extensión donde además de emplear todo el conocimiento técnico adquirido durante más de 30 años, han dado un paso más en la innovación empleando un novedoso sistema de plantación: Keyline o línea clave.
“estaríamos hablando de viticultura regenerativa, recuperamos la vida del suelo de forma natural”
Este sistema, que surgió en Australia en los años 50, se ha empleado para diferentes tipos de cultivo, logrando frenar la pérdida de vida y fertilidad del suelo causada por la erosión. Con él, las vides se plantan siguiendo las curvas de nivel del terreno. Tras un minucioso estudio topográfico, un sofisticado sistema de un GPS calcula el punto exacto donde plantar cada vid, además de marcar una serie de canales para distribuir el agua por el terreno. De esta forma los recursos hídricos se aprovechan mejor, aumentando el tiempo de filtración de agua, y se evita la erosión del suelo generada por escorrentía.
El sistema keyline, por tanto, mantiene la vida del suelo, de forma natural: “estaríamos hablando de viticultura regenerativa, recuperamos la vida del suelo de forma natural”, explican desde la bodega. Así, en este viñedo no sólo pretenden cosechar uva, sino que esperan “cosechar” también agua y suelo.
Bodegas RODA no solo es la primera bodega que planta una extensión de vid de esta magnitud con este sistema, sino que también han sido pioneros a nivel europeo.
Cruzada contra el imperio monoclonal
El peligro de la erosión no sólo está en el suelo. También está en peligro la erosión genética de la tempranillo, por el abuso de selecciones monoclonales. El equipo de viticultura lleva seleccionando material genético de la tempranillo de diferentes puntos de La Rioja desde el año 98. Pero en 2007, tras una selección de biotipos, llevaron a cabo un estudio para la recuperación de material genético. El objetivo era crear una familia de biotipos que se complementaran entre sí. Tras un amplio estudio en el que se vinificaron cada uno de los biotipos por separados para ver su comportamiento a nivel de viticultura y enológico, el resultado fue: Familia Roda 107.
Está disponible para el resto de viticultores, ya que se comercializa, pues desde la bodega apuestan por el valor competitivo que aporta a la zona. Además, como afirma Agustín Santolaya, director general de la bodega: “es una cruzada contra el imperio de lo monoclonal y sobre todo hacer una viticultura que ya se hacía antes, pero con tecnología y conocimientos del siglo XXI”.
Con esta selección, además, han comprobado que las vides empiezan a dar su mejor expresión mucho antes que otro tipo de viñedos, obteniendo vino de gran calidad incluso cuando solo tienen 10 años. “Antes sólo conocíamos la viña vieja como forma de apostar por la excelencia, pero ahora hemos encontrado otra forma más” explica Mario Rotllant, propietario de la bodega.
En este nuevo viñedo hay material genético de Roda 107 así como de otros. Buscan con ello una nueva familia de biotipos o una evolución de la 107.
El conocimiento de 30 años en un viñedo
En este nuevo viñedo se han aplicado tres décadas de conocimiento e investigaciones. Todo enfocado a lograr la mayor calidad en el vino, con el máximo respeto al medio ambiente.
El viñedo, además de estar plantado con el sistema Keyline, y haber utilizado diferentes biotipos de tempranillo seleccionados, se trabaja en ecológico, se utilizan energías limpias, cubiertas vegetales o diferentes tipos de abonos, entre otras.
Periodista especializada en el sector del vino.
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