Tres propuestas de enoturismo para disfrutar del verano de una forma diferente

El pool bar de Abadía Retuerta Ledomaine se convierte en rincón gastro

Los días de calor cuesta alejarse de la piscina, por eso, para disfrutar al máximo de ese momento, en Abadía Retuerta LeDomaine han creado un pool bar con una propuesta ligera, sencilla pero muy sabrosa para todos los clientes del hotel. El chef Marc Segarra ha dado el protagonismo a la parrilla de sarmientos que imprime un sabor diferenciador y una forma de cocinar muy apetecible los días de verano. A partir de ahí y con una materia prima de calidad, la carta del pool bar cuenta con ensaladas, pescado de lonja, pulpo, solomillo, presa y pincho de lechazo. Si lo que se quiere es tomar un aperitivo, nada mejor que las tablas de ibéricos y de quesos artesanos que casan a la perfección con los vinos de la propia bodega.

Siguiendo con la estela de aprovechar al máximo el buen tiempo, el servicio de cenas de la Vinoteca se traslada al Jardín del Claustro para disfrutar de una atmósfera única a la luz de las velas. Los huéspedes del hotel también podrán tomar el desayuno en dicho jardín.

El Refectorio, con una estrella Michelin, sigue ofreciendo los dos menús degustación en el horario de cenas y está abierto a clientes externos del hotel, donde Marc Segarra explora lo mejor de cada ingrediente y con buena técnica crea platos inolvidables.

“LAN en tres letras”, el retorno a los orígenes

Con más de cuarenta años de tradición vitivinícola, la bodega riojana arranca el verano con un nuevo proyecto de enoturismo: “LAN en tres letras”. Siguiendo el acrónimo de las tres provincias que forman parte de la DOCa Rioja, (L de Logroño, hoy La Rioja; A de Álava y N de Navarra), esta propuesta nos lleva de viaje.

El recorrido comienza en Lanciano, su viñedo emblemático, donde la L hace referencia a la leyenda que rodea al puente Mantible cuyos restos descansan a pie de viña. El camino continúa en la espectacular sala de crianza donde la A indica la importancia de la Arquitectura de la bodega y al Festival Internacional de Arquitectura y Diseño de Logroño en el que LAN participa activamente convocando un concurso internacional y exponiendo en la bodega la obra efímera ganadora. Y por último la N recuerda al visitante el número 12 que designa el depósito de descube Número 12, favorito de los bodegueros y que da nombre al vino LAN D-12, aunque también esa N se refiere a los nombres, de todos los hombres y mujeres que mantienen vivo el legado de la bodega.

Después de este recorrido, de 90 minutos de duración en la que se incluye una cata de tres vinos con aperitivo, los invitados pueden disfrutar de unos vinos en el nuevo LAN bar y disfrutar de alguna que otra sorpresa a la vez que aprenden más cosas sobre el vino y el arraigo de esta marca en la larga tradición vitivinícola de la región.

Valbusenda Hotel Bodega & Spa, a orillas del Duero

Rodeado de viñedos en plena vega del río Duero, entrar en Valbusenda Hotel Bodega&Spa es un oasis de desconexión y relax. Dotado de cinco estrellas, el tiempo se para al atravesar sus puertas. Con 35 lujosas habitaciones, el hotel cuenta con un spa, con una amplia carta de tratamientos de belleza y bienestar, piscina al aire libre y zona de fitness.

Su restaurante Nube es una apuesta por la nueva gastronomía en la que las recetas tradicionales incorporan sutiles toques internacionales que dan lugar a una cocina vanguardista que marida a la perfección con cada uno de sus vinos, además de contar con una cuidada selección de otras referencias nacionales e internacionales.

Y para que la experiencia sea completa, no puede faltar una vista a las Bodegas Valbusenda y disfrutar de alguna de las varias catas que ofrecen. Situada a orillas del río Duero, dicha bodega está dotada con la última tecnología en equipamiento y control y produce un total de 12 referencias bajo la D.O. Toro, siendo esta región de Zamora una de las zonas de mayor prestigio vitivinícola.

Redacción

Redacción La Gaceta del Vino