Arranca la World Bulk Wine con el cartel de no hay billetes
El Rai Elicium de la capital holandesa va a contar con las bodegas productoras más importantes de Francia, Italia, Chile, Sudáfrica, Argentina, Grecia y Bélgica, además de España, claro está.
La organización de la World Bulk Wine Exhibition (WBWE), el encuentro mundial de compradores y vendedores de vino a granel que abrirá sus puertas el próximo día 22 de noviembre en Ámsterdam, ha cerrado este fin de semana su plazo de inscripción, usando el símil taurino, con el cartel de “no hay billetes”, ya que se ha llenado todo el espacio ofertado con la presencia de cerca de un centenar de participantes.
Si en la primera edición, celebrada a primeros de noviembre de 2009, tomaron parte 72 empresas, la mayoría de ellas procedentes de España, y más concretamente, de Castilla-La Mancha, en esta ocasión, el Rai Elicium de la capital holandesa va a contar con las bodegas productoras más importantes de Francia, Italia, Chile, Sudáfrica, Argentina, Grecia y Bélgica, además de España, claro está.
Esta presencia, que en el caso de algunos países como Francia o Argentina, se sitúa en la participación de 20 empresas o de cerca de 15 en el de Italia, dan idea de la dimensión que el certamen ha adquirido de cara a esta segunda edición en el que se va a contar con compradores no sólo de los países antes citados, ya que España, Francia e Italia mueven la mayor parte de los vinos a granel del mundo, sino de otros importantes compradores procedentes de países como China, Corea, India Rusia, Suecia o Nigeria, entre otros.
Si la capacidad de compra de los asistentes a la primera edición se elevaba hasta los 22 millones de hectolitros, con una oferta aproximada de 15 millones, en este caso los compradores elevan esa capacidad hasta los 30 millones de hectolitros, mientras la oferta puede situarse cerca de los 20 millones de hectolitros.
Pero el evento cuenta, además, con un atractivo programa de conferencias técnicas apoyadas por la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), cuyo director general, Federico Castellucci, tiene previsto asistir a la inauguración oficial de las mismas. Junto a él, otros ponentes de prestigio como el jefe de la Unidad de Economía y Derecho de la OIV, Ignacio Sánchez Recarte; el director general del Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV), Rafael del Rey; la directora general de la Federación de Cooperativas de Languedoc-Rosellón, Pascale Oriol; el director general de Enovía Francia, Bruno Kessler; el presidente de la Unión de Cooperativas de Castilla-La Mancha (UCAMAN), Ángel Villafranca, o la enóloga italiana Valentina Ciccimarra.
Todo parece indicar que la decisión de celebrar el encuentro en un lugar neutral, en la capital de un país no productor y en un sitio equidistante del resto de capitales europeas ha servido para conseguir una mayor credibilidad no sólo entre los bodegueros y cooperativistas españoles sino también entre los franceses e italianos que podrían tener ciertos recelos hacia un evento organizado por una empresa de capital español.
La decisión de las Cajas Rurales de Albacete, Ciudad Real y Cuenca de apoyar con un 40% del coste la participación de las empresas de Castilla-La Mancha ha sido también un importante impulso en unos momentos en que bodegas y cooperativas necesitan ayuda para impulsar sus ventas en el exterior, a lo que se añade la aportación del 25% decidida por la Fundación Tierra de Viñedos.
La suerte está echada, como decían los clásicos. Ahora falta que la tendencia al alza de las ventas de vino expuesta recientemente por el OEMV se concrete con un flujo comercial importante que surja de los contactos que se mantengan durante la celebración de la WBWE por el bien de todo el sector. No sería una mala forma de terminar el año 2010 que se vislumbra como el de la recuperación tras la caída, sin precedentes, de la venta de volúmenes en el exterior del pasado año.
Periodista. Miembro de AEPEV y FIJEV
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