Vallobera, la marca de Javier San Pedro, apuesta por la graciano
No parece una rareza que un productor riojano, como Javier San Pedro, apueste por la variedad de uva graciano en esta Denominación de Origen Calificada, pero sí es novedoso que lo haga en su terreno, en Rioja Alavesa, concretamente en la localidad de La Guardia, a más de 600 metros de altitud.
Sin embargo, San Pedro y Ana Ortega, al frente de Vallobera, son personas de retos y han descubierto que esta uva, plantada en una parcela de poco más de seis hectáreas, en las estribaciones de la Sierra de Cantabria, consigue una excepcional maduración y una acidez que le permite un gran equilibrio, tras pasar 16 meses de crianza en barrica y acabar redondeándose en botella.
San Pedro considera que el cambio climático está propiciando un mayor número de sol y calor, un régimen inferior de lluvias y eso, unido a rendimientos bajos, hace que la variedad de uva graciano sorprenda gratamente en esta área.
Vallobera graciano cuenta con 38.000 botellas numeradas y sorprende por su nariz tan potente con notas de frutos del bosque y notas florales de violetas. En boca es potente, pero con tanino amable y sedoso.
Periodista. Miembro de AEPEV y FIJEV
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