Una veintena de bodegas de todo el mundo hacen un llamamiento para descarbonizar el sector

Un total de 22 directores y propietarios de bodegas de todo el mundo han firmado una carta en la que instan a los empresarios vitivinícolas a unir esfuerzos para descarbonizar el sector del vino y empezar a trabajar para conseguir cero emisiones de carbono en 2050.

En este comunicado afirman que “La emergencia climática es, con diferencia, la amenaza más seria a la que nos enfrentamos como viticultores y productores de vino” y el contexto de la celebración de la COP26 que tiene lugar estos días en Escocia, con los principales dirigentes políticos, para reafirmar su apoyo a los compromisos asumidos en el Acuerdo climático de París en 2015 para limitar el calentamiento global, “es un momento crucial para que expresemos, en nombre de la comunidad vitivinícola, nuestro apoyo para que continúen estos importantes esfuerzos y tomemos medidas dentro de nuestras propias empresas”.

Y continúan “sin una reducción de las emisiones rápida y decisiva, nuestro futuro se alterará a niveles difíciles de imaginar, con consecuencias devastadoras para nuestras queridas regiones vinícolas y los vinos que producimos para personas de todo el mundo”. Además, afirman que el sector vitivinícola tiene un papel clave en los esfuerzos de descarbonización.

El sector vitivinícola tiene un papel clave en los esfuerzos de descarbonización.

“Nuestras bodegas se ha unido a International Wineries for Climate Action (IWCA) porque creemos que ha establecido el protocolo correcto sobre cómo debe medir y reducir una bodega su huella de carbono, así como unificar nuestra voz para que se pueda impulsar una acción más rápida en toda la cadena de suministro del vino y una red de apoyo para compartir las mejores prácticas”. International Wineries for Climate Action fue fundada en 2019 por Familia Torres y Jackson Family Wines, en Estado Unidos. IWCA es un grupo de trabajo de colaboración para lograr que todos sus miembros se comprometan a conseguir Net Zero (cero emisiones de carbono) para el año 2050.

Animan a otras entidades del sector a unirse a IWCA pues, explican en esta carta: “Nos enfrentamos al imperativo inevitable de que el liderazgo empresarial actual es inseparable del liderazgo climático. Creemos que cada uno de nosotros tenemos la obligación de hacer lo que esté en nuestras manos para, dentro de nuestra área de influencia, reducir nuestras emisiones. Creemos que el sector vitivinícola puede convertirse en un modelo de esperanza y acción en la respuesta mundial a la crisis climática. Y creemos firmemente que ser miembro de IWCA es la forma más efectiva de acelerar los esfuerzos individuales de descarbonización de una bodega, y por extensión la descarbonización del sector vitivinícola en general.”

Medición y compromiso

Desde este grupo de trabajo indican que las acciones para ser más sostenibles pasan primer por la medición de las emisiones de carbono, de principio a fin, y después comprometerse a llevar un plan para su reducción, consiguiendo llegar a una actividad de cero emisiones en 2050. Desde IWCA quieren desarrollar una metodología estandarizada para que las bodegas puedan calcular las emisiones anuales de los gases de efecto invernadero. Un paso clave para las bodegas más pequeñas, y que no suponga una gran inversión. Así, han desarrollado una calculadora de gases de efecto invernadero para las bodegas de los EE.UU., en línea con el Protocolo GHG del World Resources Institute y la norma ISO-14064. Está previsto implementar actualizaciones regionales en la herramienta para ampliar su accesibilidad.

Redacción

Redacción La Gaceta del Vino