Crece el consumo de vino en España en 2016
Según los datos presentados por el Observatorio Español del Mercado del Vino, aumenta ligeramente el consumo interno y mejora el valor medio de las exportaciones de vino; todo ello, en el marco de unas producciones de los últimos años más equilibradas con las necesidades del mercado.
El año 2016, según apunta la Memoria del OeMv, ha resultado positivo para el vino por la combinación varios factores: mercados internacionales con menos volumen pero más valor, recuperación del consumo en la España post-crisis, particularmente en hostelería, y producciones equilibradas tanto en España como a nivel mundial.
Tal y como expresa la Memoria “El año se ha caracterizado por una recuperación del consumo interior en España, como conjunto del canal de alimentación, hostelería y un tercer canal que incluye la venta directa, el enoturismo, la venta online y el autoconsumo y por un menor volumen exportado por descenso, sobre todo, del vino a granel sin ninguna indicación, con una facturación estable y precios medios al alza.
Las primeras estimaciones del OeMv apuntan hacia un posible incremento de cerca del 2,5% en el consumo nacional de vino, impulsado por una mejora notable en el canal de hostelería y restauración, que algunas fuentes como Nielsen estiman superior al 10%. Todo ello, tras tres años en los que la caída ya se había detenido y se apreciaba una tendencia clara a la recuperación. Además, se suma otra buena noticia, la recuperación de las ventas de vinos con denominación de origen, los espumosos y cavas en las tiendas y supermercados y un mantenimiento o ligera recuperación en el tercer canal de ventas directas, enoturismo, ventas online y autoconsumos, así como la buena marcha de determinados productos como los blancos de calidad, los vinos de baja graduación o los tintos de verano.
Un contexto, en definitiva, de mejora, donde el consumo nacional de vino se situará por encima nuevamente de los 1.000 millones de litros. Una recuperación que se produce tras la caída continuada registrada desde los años 80.
Por otra parte, las exportaciones españolas, liderando lo que está sucediendo en el comercio mundial de vino, se redujeron algo en cantidad pero mejorando su precio medio. En 2016, el precio medio del vino español en los mercados internacionales aumentó un 7,3%, lo que prácticamente compensó la menor salida, sobre todo, de vinos a granel, para concentrar las exportaciones algo más en vinos envasados y mantener la facturación global en 2.635 millones de euros.
La mejora del vino español en sus dos grandes mercados se produce gracias al esfuerzo de las marcas y las empresas y, entre otros factores, también por la existencia durante los últimos tres años de producciones equilibradas con las necesidades comerciales en el entorno de los 43 millones de hectolitros.
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