Los rosados franceses rompen el tópico de vino de segunda

En solo diez años, las exportaciones de vino rosado francés se han incrementado más del 30% y el país galo es el primer consumidor mundial de este tipo de vinos con algo más de 800 millones de litros, justo un 50% más desde los 536 millones de litros de hace una década.
Pero Estados Unidos, el mayor consumidor de vino del mundo, se encuentra en segunda posición y no para de crecer en su consumo de rosado, según informaciones de La Revue du Vin de France y de la agencia France Press.
Las ventas del rosado de Provenza, santo y seña del vino francés de este tipo, crecieron en 2015 un 58% y enviaron al otro lado del Atlántico más de 31 millones de botellas frente a los 20 millones de botellas de 2014. Este incremento continúa durante el primer trimestre de 2016 hasta superar el 35% con respecto a la cifra récord del año precedente.
El rosado, según algunos bodegueros franceses, es todo un éxito en los mercados norteamericanos que van desde Florida a California, tras pasar por Nueva York y Chicago. Parece que la seducción del consumo de rosado entre los acaudalados americanos que acuden a la Costa Azul, especialmente Saint-Tropez, continúa después cuando vuelven a su país.
La exportación representa el 21% de los vinos rosados de Provenza, pero también crecen las ventas de Languedoc, el Valle del Loira o el Valle del Ródano, no solo en mercados como el estadounidense sino también el británico donde el 2015 crecieron las ventas un 35%, tendencia que continúa durante este año.
Redacción
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