Récord de facturación en exportación
Los últimos datos indican que España ha marcado un récord en el valor de sus exportaciones de vino durante el año 2017. Más de 22 millones de hectólitros de vino salieron de nuestras bodegas para viajar por todo el mundo, por valor de 2.847,2 millones de euros.
Un total de 2.284,1 millones de litros. Con esta cifra, si el año en el que estamos igualáramos ventas y con la cosecha que hemos tenido esta campaña, seriamos deficitarios en vinos, ya que si a estos más de 22 millones, le sumas los algo más de 10 de consumo, otros vinos, vinagrerías, alcoholeras, etc., no tenemos vino suficiente.
Aunque, claro está, nos abastecemos de los excedentes que tenemos de otros años, aparte de que, de esos 22 millones, una gran parte corresponden sin duda a la anterior cosecha, la de 2016.
Pero no quiero hacer este artículo solo de datos, pues ya hemos publicado diversos artículos con datos exhaustivos en El Correo del Vino Diario. Quería hacer este articulo como un reconocimiento más a nuestros empresarios, a los que ya hay que adjuntar, por su volumen, a las cooperativas, que, con su esfuerzo y trabajo constante, han logrado este gran triunfo para España.
Los que ya peinamos canas, podemos acordarnos, no hace tantos años, de cuando solamente la palabra exportar era prácticamente una tabú para la inmensa mayoría de la gente del vino. Exceptuando un pequeño puñado de empresas, pioneras en esto y que fueron las que abrieron los primeros caminos al extranjero, nadie exportaba, y ni se le pasaba por la cabeza. Este año, por el contrario, han sido cuatro mil las empresas que han exportado vino.
Muchos de ustedes recordarán las célebres exportaciones a Rusia de los años 80. Cuando dicho país abría la boca a los vinos españoles, el vino subía; pero los trenes o barcos para Rusia eran expedidos por muy pocas firmas, claro que estas firmas debían comprar vino al resto y eso era lo que hacía subir el vino. Por aquellos años, China ni siquiera se nombraba…
El sector del vino siempre ha tenido hombres intrépidos, arriesgados, valientes. Es cierto que muchos quedaron en el camino, ya que era difícil y lleno de piedras, pero otros lo lograron: abrieron y alisaron esos caminos para que los que venían detrás les fuera más cómodo hacerlo.
Hoy día estamos entre los tres primeros países del mundo y nuestros vinos van a Francia, Rusia, Alemania, China y multitud de países, en donde cada día se aprecian más nuestros vinos, y lo que es más importante, aunque el precio es todavía importante, cada día nos compran más vinos con precios más altos. Es por tanto el camino a seguir, demostrar que tenemos vinos que pueden ser baratos, pero sobre todo de calidad. Y de una calidad muy alta, para que no les importe pagar algo más por un vino que realmente lo merece.
Mi sincera y emotiva felicitación a ese grupo de hombres que siguen luchando cada día en los mercados mundiales, por abrir paso a nuestros vinos. Por los datos, sabemos que lo están haciendo realmente bien.
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