Catar, catar y volver a catar. Valdeorras un brindis de sensaciones
Hace unos meses, los días sábado 1 y domingo 2 de junio estuvimos invitados por el CRDO Valdeorras que está ubicado en Vilamartín de Valdeorras, un grupo de periodistas y comunicadores especializados, bloggers e influencers relacionados con el mundo del vino que vinimos procedentes de diversas ciudades españolas tales como Alicante, Barcelona, Madrid, Ponferrada, Valencia y Vigo, para conocer a sus gente, el potencial de todo su territorio y disfrutar de las características de sus vinos blancos
Para situaros esta comarca de Galicia es la más oriental de la provincia de Ourense, en el noroeste de España, estando muy cerca de la provincia de León y bañada por tres ríos Xil, Bibeo y Xares. Esta zona tiene un clima mediterráneo-oceánico (con influencia atlántica), con inviernos fríos, veranos cálidos y otoños y primaveras suaves.
Lo primero que me sorprendió fue la forma de visitar la DO de Valdeorras, pues crearon una experiencia y vivencia muy diferente e inolvidable.
Las tres catas que nos ofrecieron las realizamos el mismo sábado dentro de una ruta de senderismo, de la mano de A Ruta dos Fornos de Celavente, con la cual pudimos disfrutar de un precioso paisaje y de un fantástico día soleado.
Lo más diferenciador fue que en vez de hacer una única cata con todos sus vinos, nos hicieron tres catas separadas, por variedades y tipos de elaboración, en la cual pudimos ver el carácter diferenciador de cada variedad (godello, mencía, garnacha tintorera y brancellao) y cómo se expresan en función de sus tipos de suelos y orientaciones.
También nos encantó que en esta cata después de probar los vinos pudiéramos también comprobar y disfrutar de algunos de sus platos más tradicionales, pues a medida que ibas caminando y haciendo la ruta, íbamos parando en los diferentes Fornos y en cada uno de ellos nos ofrecieron godellos con lacón asado, tintos jóvenes de mencía con chorizo asado y cordero con la garnacha tintorera y el buen pan de horno que acompañó siempre a la comida.
En el último Forno también disfrutamos con los postres donde hubo bica y tarta a la cazuela y la traca final fue con una queimada, muy bien comentada por el jefe del gabinete de comunicación de la D.O., Jorge Isla.
El último día tuvimos una maravillosa mañana visitando la bodega Godeval y sus viñedos, para terminar con una comida en su precioso Pazo.
Hemos podido comprobar que es una región de maravillosos contrastes y qué es lo que aportan las diferentes subzonas a sus vinos por esos suelos graníticos, pizarrosos, arcillo-ferrosos y calizos, así como las orientaciones de sus viñedos, su altitud por encima de los 450 m y también su clima que es ideal para elaborar vinos secos.
Además de esta visita, como llegué un día antes a la zona, tuve la suerte de visitar el Pazo do Castro donde estábamos hospedados en O Barco de Valdeorras y visitar las bodegas situadas en la zona de Rúa, Bodega Rafael Palacios, Adega Alán de Val, Adega A Coroa y Adega Melillas e Fillos y disfrutar de sus viñedos, algunos de ellos situados en laderas y por supuesto catar sus magníficos vinos.
Quiero dar las gracias en primer lugar al presidente del organismo, José Luis García Pando y propietario de la bodega O Casal y a su director técnico Jorge Mazaira y a todas las personas que nos acompañaron y que nos hicieron disfrutar y gozar de esta magnífica zona, que os invito a que descubráis, así como las 44 bodegas que componen la D.O. Valdeorras.
Director de Enocata.com
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