«Catar, Catar y volver a Catar» en el concurso Premios Arribe 2011
El sábado pasado día 12 de noviembre se celebró en Trabanca (Salamanca) la Gala de los Premios Arribe 2011, que siempre se pospone hasta el mes de noviembre que es cuando ya ha finalizado la temporada de la vendimia, en el que a las bodegas galardonadas se le hizo entrega de los premios, además también contó con una sala de cata atendida personalme
La VII edición de los Premios Arribe ha contando con 351 vinos participantes, todo un récord en la historia de este certamen, siendo premiados 98 vinos, procedentes de 30 Denominaciones de Origen de España y Portugal.
Me comentaba el presidente de la asociación Vinduero-Vindouro, José Luis Pascual que en el año 2007 contaban con 109 vinos, en el 2010 fueron 212 y que ha sido fantástico ver como a lo largo de estos años a aumentado de manera tan significativa los vinos participantes, gracias a que las bodegas se van dado cuenta de la proyección que tiene este concurso.
El acto se celebró en la sede de la Ruta Internacional del Vino Vinduero-Vindouro, que es la organizadora de este concurso internacional, que se celebró el pasado mes de agosto, formado por un jurado integrado por enólogos, profesores universitarios, presidentes y directores técnicos de consejos reguladores, gerentes de bodegas, sumilleres y profesionales de larga trayectoria internacional, procedentes de España, Portugal, Uruguay, California e Italia, además de un servidor.
Les voy a contar un poco en que consiste nuestra labor como jurados, para que puedan tener un poco más de conocimiento de como se desarrolla. Durante los dos primeros días los miembros del jurado catamos y evaluamos los vinos presentados a concurso, con la ficha de cata y análisis sensorial de 100 puntos de la OIV, evaluando los vinos presentados a concurso que se realizan a través de catas a ciegas, con unas condiciones de buena ergonomía y silencio, sin comentarios o manifestaciones entre los catadores del jurado. De este modo se evita que influya sobre la puntación del vino a valorar, garantizando la mayor objetividad de nuestras puntuaciones, que después son verificados y tratados informáticamente.
También deben de saber que las catas se hacen solo por las mañanas pues es cuando los sentidos organolépticos están en su mejor disposición., haciendo tandas de 15 vinos y parando para no saturarnos el olfato y la boca, con un máximo de cincuenta vinos por día, claro esta que teniendo que escupir los vinos como es lógico. Muchos pensaran que sin tragarse el vino es difícil de apreciar y valorar los vinos catados, pero con entrenamiento y después de asistir a muchos concursos y catas acabas aprendiendo.
Para mantener el absoluto anonimato de las muestras, las botellas eran presentadas tapadas, sin cierres originales y cápsulas, para de esta manera se disimulaba la forma e identificación de cualquier dato del etiquetado.
La participación de los vinos se organizó en las siguientes categorías: espumosos y cavas, blancos sin crianza en madera, blancos con crianza en madera, rosados, tintos sin crianza, tintos con crianza en madera inferior a seis meses, tintos con crianza en madera de seis a catorce meses, tintos con crianza en madera superior a catorce meses, generosos secos y generosos dulces.
Los lotes de cata se compusieron de la manera más homogénea posible, agrupando los vinos por variedades, por orígenes o por similares técnicas de elaboración. Dentro de las categorías indicadas, el orden se estableció a partir de la añada en orden decreciente. En los vinos de una misma cosecha, por orden creciente del tiempo de envejecimiento en madera o de menor a mayor potencia organoléptica prevista.
Con el inicio de cada sesión y grupo de vinos se realizó una autocalibración del jurado por medio de la cata de una muestra representativa de la categoría, donde se hallo la media, la mediana y la desviación típica para que los catadores que otorgamos el máximo y el mínimo cómputo expusiéramos ante el resto del comité de cata nuestras razones y cada catador tendiéramos a converger con el criterio del grupo.
En cada una de ellas se establecieron dos tipos de premios: el Arribe de Oro, un premio único que se otorga al primer vino de cada categoría con al menos 85 puntos; y el Arribe de Plata, galardón que se concede a todos los vinos que hayan recibido más de 85 puntos (exceptuando al primero de cada categoría). Por último el tercer día evaluamos el premio especial al mejor diseño e imagen corporativa, una forma muy novedosa, que consiste en valorar cada una de las botellas participantes, analizando su etiqueta, cápsula y envase, es decir la estética del packaging.
Los vinos premiados quedarán recogidos en una guía de cata que editará 12.000 ejemplares la organización del concurso, que serán distribuidos entre las bodegas galardonadas, siendo el reto para el próximo año su distribución, para difusión del reconocimiento a estos vinos que han sido catados y premiados, por los todos los países de la Unión Europea para de este modo internacionalizar más el resultado, que no la concesión de estos premios, pues seguirán dentro del ámbito de la Península Ibérica. La asociación Vinduero-Vindouro agrupa un centenar de recursos enoturísticos a través de la Ruta Internacional del Vino con el objetivo de potenciar como destino turístico de calidad la zona fronteriza entre Castilla y León y Portugal, además de impulsar, incentivar y dar a conocer las elaboraciones de calidad de todas las regiones vitivinícolas de España y Portugal y de esa manera contribuir a su difusión entre los consumidores, que tanta falta hace promocionar en el público joven mayor de edad, de una manera sana y responsable, pues de eso se trata de trabajar para impulsar el sector hacia un presente y futuro que entre todos debemos hacerlo prometedor.
A continuación os detallo el link donde podéis ver los vinos galardonados en los Premios Arribe 2011.
La Gala también acogió la entrega de los II Premios de Comunicación Enoturística, que también organiza esta asociación Vinduero-Vindouro que pretende valorar y reconocer el esfuerzo de entidades y profesionales que difunden y promocionan los recursos enoturísticos por los periodistas y medios de comunicación. Los premiados fueron cuatro innovadores proyectos de comunicación. En la categoría de "Mejor iniciativa para la difusión del enoturismo" fue para la Cámara Municipal de Setúbal (Portugal) por su proyecto "Vinum Senses", una ruta sensorial enmarcada en el enoturismo de la zona. Dentro de la categoría "Web 2.0", la compañía Vinédex se llevó el galardón por sus aplicaciones tecnológicas para bodegas. En la categoría de prensa fue premiado el reportaje "El vino que nos une", de Nieves Caballero y publicado en "Castilla y León de Vinos". Por último, General Internet Technologies ganó en la categoría multimedia por su plataforma en internet http://www.vinosdegranada.tv para la difusión de los vinos de Granada.
Director de Enocata.com
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