Previsiones de campaña
No me atrevo a dar predicciones, el vino este año puede subir o bajar perfectamente, dependiendo de una serie de factores.
Aunque a veces son precisos, no me gusta mezclar mis comentarios con datos, números, gráficos, etc. que pueden resultar tediosos. Hay otros foros y mejores sitios donde pueden ser consultados.
No obstante, sí me gusta hacer cálculos aunque sean a grosso modo, con el fin de intentar analizar lo que puede dar de sí esta campaña o cualquier otra circunstancia que nos sirva para intentar adivinar –ardua labor- por donde pueden transcurrir los derroteros del mercado de esta campaña en los próximos meses.
Yo calculo una campaña en España que puede estar entre los 36 y 38 millones de hl. es decir, entre 2 y 4 millones menos que el año pasado.
El consumo interior lo podemos cifrar entre 8 y 10 millones de hl.
Las alcoholeras deben de comprar entre 3 y 4 millones de hl.
Mostos se han hecho entre 4 y 5 millones de hl.
Otros productos, como vinagre, vinos de licor, etc. se llevarán un mínimo de otro millón de hl.
Si sumamos estas cantidades nos da un montante que oscila entre 16 y 20 millones de hl. según cojamos los datos aproximados a la baja o al alza. Lo que nos quedaría un remanente de cosecha entre 16 y 20 millones de hl.
Es cierto que tenemos existencias de más de 30 millones de hl al 31 de agosto. Pero dentro de esto hay vinos de guarda, que este año también se descontaran de los años anteriores, creo que en vino de mesa las existencias no son grandes.
Ahora tenemos la cosecha de Europa, que ya hemos comentado varias veces pero que es necesario repetir, y empezamos con Francia, con aproximadamente 2 millones de hl más. Luego tanto Alemania, Italia y Portugal con mermas de cosecha importantes. Europa es deficitaria de vino en esta cosecha con total seguridad y creo que en unas cantidades superiores a 15 millones de hl. Luego están los países terceros, Rusia, China, etc.
¿A qué nos lleva esto? Aunque es fácil sacar conclusiones, es muy importante tenerlo en cuenta ya que decidirá la marcha de nuestros mercados. Todos los datos indican que si el nivel de exportación se sitúa en parámetros similares a los del año pasado el vino en España debe subir sus precios, ya que una demanda superior a 20 millones de hl nos dejaría con las bodegas vacías, o al menos muy mermadas.
Por el contrario, un retraimiento de unos pocos millones de hl que no se exporten nos llevaría a la situación totalmente contraria, a excedentes en las bodegas, pesadez de los mercados, ya que el mercado interno es incapaz de mover esto, y una disminución en los precios del vino, quizá de importancia.
Como ven, auguro una campaña muy complicada, ya que creo que puede pasar casi cualquier cosa y no le quito la razón ni a los que dicen que estos precios son insostenibles, ni a los que dicen todo lo contrario, es decir, que el vino debe de seguir subiendo a lo largo del año conforme reduzcamos existencias.
Sinceramente no lo sé, ni me atrevo a vaticinar nada, y saben que suelo ser valiente en este extremo y arriesgarme a dar orientaciones al menos de por dónde puede ir el mercado a lo largo de una campaña, pero es que esta vez puede pasar de todo, bajar, subir, o incluso estabilizarse a lo largo de los meses.
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