FENAVIN es ya en su V edición la feria internacional que necesitaba España

Hemos querido esperar unas semanas para hacer balance de un encuentro que, a todas luces, ha batido todas las previsiones

La Feria Nacional del Vino (FENAVIN), que se celebró en Ciudad Real entre los días 5 y 7 de mayo, ha concluido con un total de 118.000 contactos comerciales, un 70% más que en la edición anterior de 2007 en lo que se alcanzaron 70.175, mientras las visitas a la feria han llegado a las 80.000 personas, 65.000 de ellas acreditadas, lo que supone un 36% más que en 2007. Hemos querido esperar unas semanas para hacer balance de un encuentro que, a todas luces, ha batido todas las previsiones más optimistas y, además, en un año de fuerte recesión económica.

El presidente de la Feria, Nemesio de Lara, que compareció ante los medios de comunicación el último día del evento, junto al director, Manuel Juliá, y al coordinador institucional, Ángel Amador, destacó el incremento de compradores nacionales que se han cifrado en 3.780, con un crecimiento del 129% respecto a la edición anterior e internacionales, 2.124, con un 83% de aumento. De Lara incidió en que FENAVIN es sinónimo de negocio, añadió que los compradores internacionales han llegado procedentes de 43 países y que un total de 510 vinieron invitados por la organización.

La Galería del Vino, quizás el mayor atractivo de la Feria, ya que permite a los compradores catar los vinos y decidir, sin presiones, con qué bodegas mantienen contacto, ha contado en esta ocasión con un total de 1.153 marcas de vino, 81 de ellas de vinos ecológicos, y ha recibido la visita de 14.600 profesionales, un 75% más que en 2007. Esta idea, que podría hacerse itinerante para mantener en vivo durante los lapsos de tiempo que transcurren entre una y otra edición de la Feria, no sólo se ha consolidado sino que ha abierto el debate con nuevas sugerencias que la hacen cada año más necesaria.

El presidente de la Feria resaltó que el crecimiento de ésta se produce en un contexto mundial de crisis económica “y nos satisface que el 90% de los expositores de la edición anterior han repetido en ésta, señal de que FENAVIN les interesa, ya que se trata de una feria seria y profesional”. Se congratuló de que la proyección de la Feria haya alcanzado en su quinta edición “connotaciones claramente mundiales que la sitúan como referencia inexcusable en el ámbito universal del sector vitivinícola” y dijo que ya era hora de que se nos admire desde fuera de una manera reconocida cuando desde hace muchos años es Ciudad Real la que se ha dedicado a mirar y admirar lo que se hacía en otros lugares.

Mostró su preocupación, sin embargo, por la situación del sector vitivinícola español y dijo que el ambiente, pese al éxito de la feria, es raro porque existe preocupación en la gente y falta unidad para afrontar retos como el de la crisis económica. En este sentido apeló a la unidad del sector porque en un contexto de enfrentamiento, aclaró, siempre salen perdiendo los que cultivan la viña, “los más pobres, los que a nosotros nos movieron a hacer esta feria”.

Abogó por un Plan Estratégico Nacional de Desarrollo Vitivinícola que esté permanentemente abierto a las evoluciones del mundo del vino y solicitó un esfuerzo a la hostelería para bajar los precios del vino y elevar el consumo interior, manteniendo siempre la premisa del consumo responsable. Y no le falta razón a De Lara quien debería exigir a responsables de su propio partido, y me consta que lo hará, que dejen de equiparar el vino, considera alimento por ley, con el alcoholismo y las drogas, que dejen de señalarlo como culpable de numerosos accidentes en los anuncios de la Dirección General de Tráfico; que le diga a la vicepresidenta Económica que hace muy bien en ser abstemia pero que deje libertad a los demás para que puedan ejercer su derecho a un consumo responsable y que les inste a luchar en las instancias comunitarias para que puedan hacerse campañas de fomento del consumo moderado en los mercados interiores y no sólo en los de países terceros.

Y no quería cerrar este capítulo dedicado a FENAVIN sin tener unas palabras de admiración y cariño por el director de la Feria, Manuel Juliá, sin cuyo trabajo y entusiasmo no sería posible que FENAVIN, al menos como la conocemos, existiese. El galardón otorgado por la Federación Internacional de Periodistas del Vino (FIJEV), a propuesta de la organización española AEPEV, no podía haber sido más justo y acertado.

José Luis Murcia

Periodista. Miembro de AEPEV y  FIJEV